Añadir nuevo comentario

Dios mío que película!. Solo puedo decir (confesar) que puso un nudo en mi garganta de principio a fin y más de una vez me sacó las lágrimas. <br />Y me hizo llorar, no tanto por el curso de la conmovedora ficción, sino por la evocación de tanta realidad dolorosa experimentada a nivel personal, familiar y social. Para muchos de nosotros, este filme es un documental enmarcado en el sufrimiento, los vacíos y las asperezas de la “no ficción”. <br />Quiera Dios que esta película sea motivo de reflexión sobre la Cuba que tenemos y esa otra que soñamos con mirada esperanzadora y que hemos de construir a golpe de inteligencia y voluntad. Una patria devenida enorme aula en la que todos hemos de aprender (y sobre todo de vivenciar) los valores del diálogo, la inclusión, la tolerancia y la reconciliación.
CAPTCHA
Esta pregunta es para comprobar si usted es un visitante humano y prevenir envíos de spam automatizado.
CAPTCHA de imagen
Introduzca los caracteres mostrados en la imagen.