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Yo diría que la causa principal está en la casa. La familia. Después viene la escuela, que muchos maestros no tienen interiorizado que están formando valores en los niños que pasan muchas veces más tiempo en la escuela que en casa. Pero también en los dirigentes, que muchas veces dirigen sin empatía, sin respeto por el prójimo. Que piensan que el respeto se gana dando gritos y no con el ejemplo. Por último tenemos las redes y la televisión. Desgraciadamente con las redes lo único que podemos hacer es tratar de enseñarle a nuestros hijos a discernir entre lo bueno y lo malo. Pero la pelea es dura. En la televisión, todavía se puede hacer un poco más, aunque tiene la competencia de los espectáculos e internet. Pero sí, también influye la situación económica actual y las secuelas del llamado Periodo Especial. Ya desde aquellos tiempos venía formándose una élite sin mucha educación, amparada en el dinero y los negocios sucios, junto a la corrupción y la apatía nuestra para combatirla. se llenaron las escuelas a toda prisa de muchachos que no tenían la capacidad para educar, pero al menos les daban las asignaturas a los niños. Recuerdo las reuniones de padres de mis hijos. Yo salía más preocupado por su formación integral allí que por sus notas. Y esa es la generación que está saliendo ahora a la calle y está teniendo sus hijos. No digo que en todos lados sea así, pero fue bastante generalizado. Ni hablar de la migración masiva hacia la capital o de los policías que nos trajeron desde muchos lugares. Algunos no sabían ni hablar. Otros no se sabía si estaban para mantener el orden o alterarlo. La permisibilidad de nuestras leyes en virtud de un falso concepto de derechos humanos e igualdad. Todo eso nos ha llevado a este momento. Al menos desde mi punto de vista. ¿Solución? De momento ninguna. Pues seguimos sin darnos cuenta de todo lo que hay que arreglar para empezar a revertir la situación. Empezando por la sobrepoblación de la ciudad. Incentivar que los mejores integralmente quieran ser maestros, etc.