Una consagración que refuerza los lazos culturales entre Grecia y Cuba

Como un hecho simbólico que refuerza los lazos de hermandad y espiritualidad entre la cultura grecolatina y Cuba, se realizó ayer, en el centro histórico de La Habana, un evento en celebración por haberse consagrado, hace dos décadas, la Sacra Catedral Ortodoxa Griega San Nicolás de Myra, en la Isla.

En la cita se recordó el encuentro del líder histórico de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz –quien reconoció a la iglesia como un regalo del pueblo cubano y símbolo de la herencia helénica– con el Patriarca, en ese entonces, Ecuménico Bartolomeo.

Leira Sánchez Valdivia, funcionaria de la Oficina de Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido, dijo que el camino construido hasta ahora muestra el compromiso de la Iglesia Ortodoxa Griega por ser parte de la diversidad religiosa.

Agradeció las constantes muestras de solidaridad hacia la Mayor de las Antillas, y resaltó el servicio de la catedral, por «aportar de manera incondicional hacia el pueblo cubano».

El Arzobispo Santiago, Exarca de la Metrópolis de México, Centroamérica y el Caribe, agregó que la construcción de esa iglesia representa un llamado a la humanidad y que, gracias a Fidel, quien nunca abandonó su amor por la palabra escrita y la sabiduría, se logró.   

Añadió que, luego del triunfo de la Revolución Cubana, se crearon espacios para todos, incluso para los fieles ortodoxos. «La Revolución ha echado raíces y la sociedad civil ha encontrado su hogar en ella».

En la conmemoración también se le rindió profundo homenaje al historiador Eusebio Leal Spengler, quien estuvo ligado a la construcción del templo, y lo describió como un homenaje a la cristiandad griega.

La Sacra Catedral Ortodoxa Griega San Nicolás de Myra es un ejemplo de arquitectura bizantina clásica y, al momento de su constitución, representó la más alta expresión de sentimiento ecuménico que unía la vocación redentora de las naciones de Grecia y de Cuba.

En el encuentro estuvieron presentes Emilio Lozada, jefe del Departamento de Relaciones Internacionales del Comité Central; Eloísa Valdés Pérez, jefa del Departamento de Atención a las Instituciones Religiosas y las Asociaciones Fraternales, del Consejo de Ministros; el Eminentísimo Arzobispo de Australia, Makarios, enviado de su toda Santidad, el Patriarca Ecuménico Bartolomeo; Theodoros Tsakiris, embajador de la República de Grecia en Cuba, representantes del cuerpo diplomático y otras autoridades del Partido y del Gobierno de La Habana.