EE.UU. incluye en lista negra a 24 compañías chinas por "ayudar a construir islas militares"

La Casa Blanca ha anunciado este 26 de agosto que EE.UU. impondrá nuevas sanciones contra empresas y personas chinas vinculados a las actividades de su país en zonas en disputa del mar de China Meridional.

A partir de esta jornada, Washibgton impondrá "restricciones de visado" a estas personas chinas "responsables o cómplices de la recuperación, construcción o militarización a gran escala de puestos avanzados en disputa en el mar de China Meridional" o del uso por parte de Pekín de "la coacción contra los reclamantes del sudeste asiático para inhibir su acceso a los recursos" en aguas abiertas, ha comunicado el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo.

Asimismo, el responsable de la diplomacia estadounidense ha detallado que los familiares inmediatos de las personas sancionadas "también pueden estar sujetos a esas restricciones" y ha aseverado que las 24 entidades incluidas en la lista negra son estatales.

En otra declaración, el Departamento de Comercio de EE.UU. ha acusado a las compañías señaladas de "ayudar al Ejército de China a construir y militarizar islas artificiales" en las aguas disputadas.
Aguas en disputa

Cinco países se disputan el mar de China Meridional, cuyo lecho es rico de gas y petróleo. Pekín construye islas artificiales y despliega infraestructura militar en los archipiélagos Spratly y Paracelso para consolidar su dominio en la zona, pese a las protestas de sus vecinos y EE.UU.

La situación ha provocado tensión internacional en varias ocasiones. En 2018 y 2019, el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, amenazó con declarar la guerra a China si explotaba zonas que Manila considera propias y el pasado abril Vietnam protestó por el hecho de que Pekín estableciera otras dos unidades administrativas en las islas Paracelso y Spratly.

En julio, Pompeo aseguró que los reclamos de recursos que realiza China en la zona son "totalmente ilegales" y acusó al gigante asiático de realizar "una campaña de intimidación para controlarlos" con sus maniobras militares, mientras que Pekín reiteró que las islas Paracelso son "territorio chino indiscutible".