Desde que en 1999 la Asamblea General de las Naciones Unidas designara al 12 de agosto como Día Internacional de la Juventud, nunca los jóvenes de Cuba y del mundo todo habían celebrado en panorama tan sombrío su efeméride.

No hace falta abundar en los daños causados por el Zars-COVs, esa cadena de ARN, un hilito de nada, que tiene al planeta sumido en el caos y el luto.

Esa cosa microscópica, que no llega a ser ni bicho, no hace distingos entre ricos o pobres, vagabundos o presidentes, mujeres u hombres, y tampoco entre ancianos, adultos o jóvenes.

Por eso, entre los que tienen 15 y 24 años se ha triplicado en cinco meses la proporción de infectados, según reportó la Organización Mundial de la Salud (OMS). Esa organización internacional informó que, al analizar a 6 millones de infectados entre el 24 de febrero y el 12 de julio, encontraron que la cuota de contagiados en esas jóvenes edades creció del 4,5% al 15%.

Al terminar julio, el director general de la OMS. Tedros Adhanom Ghebreyesus, comentaba: "Parece que los rebrotes en algunos países son en parte causados por jóvenes que bajan la guardia durante el verano en el hemisferio norte.”

Cuba no queda al margen de la preocupación del doctor Adhanom Ghebreyesus. Los más recientes partes del doctor Durán evidencian que también jóvenes cubanos han sido contagiados por el nuevo coronavirus.

De todos modos, hay motivos para aplaudir a los jóvenes de Cuba en este Día de los jóvenes del mundo.

Lo recordaba el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel cuando el 22 de julio les transmitía el reconocimiento del General de Ejército, Raúl Castro, por la contribución al enfrentamiento a la COVID-19:

“Ustedes –subrayaba el mandatario- acudieron con coraje a la pelea, y han regresado a sus hogares como vencedores de la pandemia, del miedo, y del egoísmo. En la edad de la fuerza, la pasión y el gusto por los desafíos, ustedes han elegido canalizar sus energías en el lugar más riesgoso, y cumplir sencillamente con el deber, en las tareas más humildes. Nadie debe dudarlo: nuestra juventud cubana está haciendo historia”.

Sobran las razones para esa afirmación, y todo el pueblo ha sido testigo del quehacer de los jóvenes cubanos contra la pandemia:

-Integrando las brigadas médicas que han llevado su solidaridad y conocimientos a otras naciones que igual se enfrentan a la COVID-19.
-Incorporados de manera voluntaria al trabajo en centros de aislamientos y hospitales
-Sumando su ayuda en la asistencia a en la atención a las familias y grupos más vulnerables
-Han funcionado en todo el país más de 2 mil 200 brigadas llamadas Jóvenes por la vida, con casi 76 mil integrantes, vinculadas a la producción de alimentos, a incentivar el ahorro energético y en, el caso de los estudiantes de Ciencias Médicas, contribuyendo con Salud Pública en las pesquisas.
-En particular, más de 47 mil estudiantes de Ciencias Médicas han estado presentes en zonas complejas o declaradas en cuarentena.
-Jóvenes cubanos han dado también su apoyo al orden interior, en la recuperación cañera, la construcción, en los polos científicos y productivos, organizando el transporte público.
-También destaca la contribución de estudiantes de Periodismo, Comunicación Social y Diseño en la difusión de mensajes de bien público asociados a la pandemia, y amplificando en especial las medidas adoptadas por el gobierno cubano.
-Estudiantes de Psicología, de conjunto con profesionales de esa disciplina, se han sumado al apoyo a la población, sobre todo vía telefónica y desde las redes sociales, donde igual es visible el aporte de jóvenes artistas en esta batalla por la vida.

En diálogo en el Palacio de la Revolución con jóvenes protagonistas de estas luchas contra el nuevo coronavirus, Díaz-Canel les comentaba sobre la canción Todo el mundo tiene su Moncada, de Silvio Rodríguez, a propósito del advenimiento de un aniversario más del asalto a ese cuartel.

“Esa canción –refería el Jefe de Estado-, es un modo de dar gracias a los héroes y heroínas de aquella gesta, y al mismo tiempo, si eso lo llevamos a estos mismos razonamientos que estamos haciendo con ustedes, es la confirmación de que ellos existen, y existirán por siempre, y existirán en jóvenes como ustedes que también han protagonizado el Moncada de estos tiempos”.