Un año y medio después del paso de la Brigada médica cubana por la ciudad de Turín, en la región italiana de Piamonte, es posible testimoniar que muchos no olvidan el gesto solidario de la Isla que los vino a ayudar en el momento más difícil y oscuro de la pandemia del Covid-19.

En la Feria Internacional del Libro de esta ciudad, la más importante de Italia y la segunda de su tipo en Europa, y que por estos días ha tenido lugar en el Centro de Convenciones Lingotto, Cuba tiene una presencia a través del Stand del Centro de Estudios Italia Cuba, con una propuesta editorial que recorre la cultura y la realidad de la Isla. También, en el Stand del Treno de la Memoria.

En el caso de la primera casa editorial, se trata de textos que van desde la cartelística en el cine cubano hasta clásicos de la historia nacional, como nos muestra su co-directora Ileana Jiménez, una músico cubana orgullosa y defensora de sus raíces, afincada en Italia hace más de 20 años y que participó como voluntaria en el Hospital OGR de Turín, donde trabajaron los médicos cubanos.

En ese catálogo diverso del Centro Italia-Cuba, los visitantes han distinguido y buscado, especialmente, tres títulos en idioma italiano que reflejan la esencia solidaria de la Revolución: Diario de Turín. La solidaridad en tiempos de pandemia, y Zona Roja. La experiencia cubana del ébola, ambos del escritor y ensayista Enrique Ubieta Gómez y en colaboración con la Casa Editora Abril; y Coronavirus: la lección de Cuba y Vietnam, del médico Abel Tobías Olivares -miembro de la brigada en Piamonte.

Diario de Turín, al decir de su autor, "es un gran esfuerzo de una pequeña editorial, un recuento en crónicas, de los cien días en que estuvimos aquí, y recoge también un grupo de entrevistas y reflexiones sobre lo que el mundo e Italia han vivido, sobre el destino de la humanidad".

Piero Guarini, editor de Diario de Turín, apasionado de la isla y codirector de Italia Cuba, cuyo mayor empeño en síntesis es dar a conocer la realidad cubana a través de la cultura, sobre todo en los más jóvenes, y romper el muro de silencio, rememora que el arribo de la brigada médica cubana a Turín en 2020, "fue un milagro, una oportunidad muy grande".

"Nosotros hubiéramos tenido que emplear años para hablar a los italianos de la solidaridad médica cubana, y no sé si nos hubieran entendido, mientras que con la llegada física, con el trabajo práctico concreto que hicieron, en pocos meses, nosotros pudimos hacer conocer Cuba", reflexiona Piero.

Para Ubieta, la experiencia vivida en Italia es "extraordinaria". Aquí pudieron constatar cómo se tejió "entre cubanos e italianos uan relación de amistad, que fue convirtiéndose en una relación profunda de amor entre los pueblos". Diario de Turín, es el testimonio de esos días.

Juntos, un esfuerzo colectivo

Otra propuesta muy atractiva para el público italiano ha sido Juntos, una colaboración coordinada por Michele Curto, presidente de la Agencia para el intercambio Cultural y Económico con Cuba, AICEC, un gran amigo de Cuba y cuya más reciente acción de solidaridad fue liderar todos los esfuerzos que confluyeron en el envío de un avión a la Isla con material médico y 151 respiradores artificiales, para combatir la pandemia de Covid cuando más duro nos golpeaba.

El libro, en el que participan Ubieta y reconocidos profesionales del periodismo, la fotografía y el dibujo italianos, y que se publica bajo el sello del Treno de la Memoria, está acompañado de un documental. En la portada, una ilustración del reonombrado Makkoz, es la síntesis de la experiencia y del encuentro: un abrazo entre un médico cubano y uno italiano.

"Juntos es un proyecto colectivo, un esfuerzo particular de artistas, profesionales, para dar memoria a un hecho importante: la llegada de los médicos cubanos y su trabajo junto a italianos, personal sanitario, voluntarios, desde miradas diversas que confluyen en resaltar ese momento histórico", ha expresado Michele, quien en cada una de las presentaciones insiste en apuntar que el libro forma parte de la tarea de crear conciencia y dejar constancia, memoria.

Precisamente El Treno de la Memoria, auspiciador de Juntos, "es un proyecto educativo que se ocupa de fortalecer en los jóvenes la historia del holocausto, y evitar que se repita, es una vía para generar conciencia contra el racismo, el nacionalismo y todas las formas de discriminación, que hoy lamentablemente estan remontando en Europa", explica Roberto Forte, su coordinador.

¿Cómo se conecta con Cuba?, indagamos. "La experiencia de la brigada Henry Reeve en Turin es una de las respuestas contra el odio y contra la discriminación, es una realizacion concreta de todo lo que proponemos. Además, un grupo de muchachos que son educadores en el Treno participaron como voluntarios en el Hospital OGR de Turin junto a los médicos cubanos. Cuba no solo ha sido importante con la brigada médica como acción de solidaridad, sino también en el tema de las vacunas, porque hay muchísima discusión actualmente, de cómo ponerla a disposición de todo el mundo, no solamente de países ricos que la pueden comprar. Cuba impulsa eso y se conecta con nuestra visión de los derechos humanos y la No Discriminación, así que para nosotros Cuba es una experiencia de resistencia".

Cuba en la memoria de los italianos

Mientras, el reconocido médico italiano Mario Salizzoni, una autoridad muy respetada del gremio en Turín y quien escribió la introducción del libro Coronavirus: la lección de Cuba y Vietnam, insistió en destacar a su paso por el Salón Internacional del Libro, la profesionalidad, el humanismo, la solidaridad y las enseñanazas de la brigada médica cubana, con una medicina que se acerca al paciente, como un amigo.

Al stand de Italia-Cuba se acercó lo mismo la profesora de idioma italiano de la brigada, Alessandra Fontana, para recordar la experiencia de haber conocido y enseñado a los brigadistas de la Isla, y para agradecer de corazón a Cuba por su ayuda, que la joven escritora e ilustradora de textos para niños, Virginia Mergé, quien se confesó emocionada de reunirse con personas que defienden sus mismos ideales solidarios. El médico pediatra italiano, Giorgio Pino, dijo sentir "un amor viejo por Cuba".

Son los sentimientos que han recorrido por estos días los pasillos de este enorme recinto ferial. Cuba y sus médicos, sin dudas, calaron profundo en el corazón de los italianos.