La Casona de Línea, espacio cultural capitalino que figura entre la preferencia del público amante de las artes, deviene en este verano escenario predilecto para compañías de teatro que llegan de todo el país.

Con una programación que no deja "enfriar" las tablas de la mítica Sala Adolfo Llauradó, este museo del teatro cubano pone a disposición del espectador diferentes piezas que permiten ponerse a tono con parte del acontecer nacional entre bambalinas.

En lista considerable de puestas y autores conocidos, junto a otros jamás escuchados, figuran atractivas opciones para emplear el tiempo en la etapa estival, a partir de una variada cartelera que solo recesa los lunes.

Los grupos Teatro Pálpito, Mefisto Teatro, y Nelson Dorr, son los elegidos en esta semana para sumergir al público en la atmósfera acogedora de la sala, y mostrarle tres sugerentes obras como Malas pasiones, Huevos y La profana familia, respectivamente.

Estas compañías serán las principales protagonistas de lo que suceda en cuanto a teatro en la Casona de Línea, que ostenta una de las más completas y variadas ofertas culturales entre sus similares de la capital.

Y por si fuera poco, la música también se da cita en otros espacios de ese palacete cultural, donde se efectúan varias peñas de cantautores como William Vivanco, desbordando los jardines y corredores con gente de todas partes y gustos.

Para la última semana del mes, el grupo Nelson Dorr reservó un plato especial, el monólogo Abakuá, con actuación especial de Arnolys Gutiérrez, cuya temática (tratada en varios textos y puestas del teatro cubano) puede decirse que garantiza ya la asistencia del espectador.