A 107 años de la tragedia del Titanic
especiales
Y un día como hoy, hace 107 años, importantes periódicos de la época vieron la luz con ediciones especiales para informar sobre el desastre, un naufragio que nadie quería creer.
Durante las primeras horas de aquella catástrofe terrible en la que perdieron la vida más de mil 500 personas, las noticias fueron confusas, hasta contradictorias, al punto de afirmar que todos los tripulantes se habían salvado.
Vendedores y pregoneros voceaban el desastre, como el que puede observarse en la foto que se volvió emblemática y fue tomada en Londres, ante las oficinas de la naviera White Star, «madre» del trasatlántico siniestrado.
Un reportaje publicado el pasado año por National Geografic da cuenta de los motivos por los que fue tragado por el océano aquel gigante supuestamente insumergible, considerado para su época «el objeto móvil más grande jamás creado».
Poseía 270 metros de longitud y 53 de altura, 46 mil 328 toneladas de peso neto, y una velocidad máxima de navegación de 22,5 nudos (unos 42 kilómetros por hora).
Ni fuegos ni sabotajes, como se ha sugerido en diferentes momentos. El Titanic, según National Geografic, se hundió debido a que un iceberg le rajó el casco por estribor unos cinco metros por debajo de su línea de flotación.
Cuando faltaban cerca de 20 minutos para la medianoche del 14 de abril, el vigía Frederick Fleet advirtió la cercanía de la mole de hielo, apenas visible. Informado por este, el primer oficial William Murdoch ordenó virar a babor y unos segundos después, mandó detener los motores.
Así evitó una colisión de frente, fue solo un roce apenas percibido por los pasajeros, pero de fatales consecuencias.
A las dos y dieciocho minutos de la madrugada, el casco del Titanic se partió cerca de su zona central, según se constató al ser hallado su pecio. Sesenta segundos pasaron cuando la proa se hundió y la popa casi alcanzó el espanto de una vertical.
Zarpará un nuevo Titanic
Se prevé que para 2022 la réplica del buque hundido, un Titanic II, vuelva a las aguas.
Construido actualmente en China por la empresa australiana Blue Star Line, reproducirá los detalles del original, incluyendo un número semejante de pasajeros y de tripulantes al de la travesía original, 2 mil 400 y 900, respectivamente.
Proyectan una travesía de dos semanas. Partirán de Dubái; llegarán a Southampton, Inglaterra, y de ahí enrumbarán a Nueva York, fin del viaje.
La diferencia con la primera y fatídica travesía estribará en que esta segunda edición navegará con la más actual tecnología, utilizando sistemas digitales de navegación; el casco, en lugar de cosido, estará soldado con más de tres millones de remaches; el combustible será diésel, en vez de carbón; dispondrán de la cantidad necesaria de botes salvavidas y, desde cubierta, seguro se tomarán muchísimos selfies, impensables hace 107 años.
Añadir nuevo comentario