El Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso es escenario de la temporada Tributo, con la que Acosta, quien reiteró su valía de gran bailarín, considerado una de las más célebres figuras danzarías de finales del siglo XX y del siglo XXI, agasajó a dos figuras principales de su desarrollo profesional y formadores de generaciones de bailarines.

Todos conocen la importancia de Ramona de Saá en mi historia. Ella sabe que encaminar a un alumno es más que crear un artista: puede salvar una vida. He hecho toda mi carrera recorriendo el camino que “Cheri" ayudó a abrir para mí. Eso siempre lo agradeceré, escribió Carlos Acosta en las notas al programa.

Sobre el británico Ben Stevenson, al que calificó de “otro pilar en mi vida”, expresó que “con él salí a la danza internacional como bailarin y durante varios años bajo su dirección en el Houston Ballet aprendí lo suficiente como para asumir con seguridad toda la etapa posterior de mi profesión”.

A ellos, en su honor la compañía Acosta Danza dedicó “Tributo”, temporada compuesta por la pieza romántica La sílfide y obras de la segunda mitad del siglo XX como Voces de primavera, Sueños de invierno, Belles Lettres y End of Time.

Integran además el programa La muerte del cisne, una coreografía sobre los originales de Mijail Fokin y Michel Descombey, Majisimo, de Jorge García, obras todas que evidencian que a Acosta Danza, que dirige el brillante bailarín le gusta asumir retos.

“Sabemos que es un gesto de valentía lo que nos proponemos en esta oncena temporada, adelantó Carlos Acosta, a cuyas palabras siguió este sábado en la noche el aplauso del público y el elogio de la crítica especializada.

“El amor y la seriedad con que nuestros bailarines-muchos se enfrentan al vocabulario clásico por primera vez-han encarado este desafío bien vale los aplausos, había dicho de manera premonitoria el director de la afamada agrupación, para el cual la danza es un todo.
Este domingo, y también del 18 al 21 de abril volverá a escena la temporada Tributo, un homenaje también a la danza, y a la consagración de Carlos Acosta a ese arte.