'Usted no puede hacer este tipo de preguntas', le dijo a su compatriota, uno de los dos únicos periodistas que pudieron plantear interrogantes, tras la reunión entre Pompeo, el presidente peruano, Martín Vizcarra, y el canciller Néstor Popolizio.

El reportero interpeló a Popolizio sobre un posible cambio en la estrategia hacia Venezuela, en vista que las medidas económicas y financieras contra ese país acrecientan la crisis, y a Pompeo cómo mientras los países suramericans reciben emigrantes venezolanos Washington exige que no se permita salir a migrantes rumbo a su territorio.

El canciller peruano, ante el cuestionamiento, se limitó a señalar que el Grupo de Lima se apresta a intensificar lo que llamó presión para aislar al gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro, y a secundar la hostilidad de Washington contra este mandatario hasta su caída.

Pompeo le dijo al periodista que su pregunta demuestra que 'usted no entiende lo que esa pasando' y alegó que no ha sido la política de Estados Unidos (de bloqueo) o del Grupo de Lima la que ha propiciado la emigración de quienes llamó refugiados, sino que todo es responsabilidad de Maduro.

También intentó convencer a los periodistas que asistían al acto final de su meteórica visita a Perú de que cualquier presión como las de Washington busca mejorar la vida de los venezolanos, cuyo gobierno ha denunciado que el bloqueo estadounidense le impide importaciones para el abastecimiento interno.

Eludiendo explicar la contradicción del gobierno del presidente Donald Trump, de negarse a recibir migrantes mientras alienta a los suramericanos a recibir emigrados venezolanos, Pompeo dijo que su país lo que quiere es que en los países emisores haya condiciones que desalienten la emigración.

De otro lado, Pompeo dijo que su gobierno ha consignado 30 millones de dólares de asistencia a Perú para la atención a los migrantes venezolanos y ofreció apoyo, sin precisiones, a una reunión que organiza esta nación en busca de cooperación internacional para sus servicios de salud y educación, rebasados por la migración.

Popolizio, ante el visitante, calificó reiteradamente de dictadura y de ilegal al gobierno bolivariano y se enorgulleció del reconocimiento del autocroclamado presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, y ratificó esa línea, criticada por sectores progresistas peruanos.

El emisario de Washington y el canciller anfitrión ensalzaron además sus relaciones en diversas áreas y Pompeo felicitó al gobierno de Vizcarra por su lucha contra la corrupción, el narcotráfico y la minería ilegal.

Cuando a Pompeo un periodista peruano le preguntó si había tratado con Popolizio sobre la demorada extradición del expresidente neoliberal Alejandro Toledo, requerido por la justicia por corrupción y prófugo en Estados Unidos, solo dijo que no habla de procesos en su país y entiende la prioridad que Perú da al tema.

Pompeo llegó en una breve visita en el marco de un gira regional en la que el tema estelar fue Venezuela.