Presidente cubano en diálogo permanente con el pueblo
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Desde abril de 2018, cuando asumió la responsabilidad como presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, realizó visitas a prácticamente todas las provincias de la nación antillana, donde conversó con las personas de a pie, en un estilo que -asegura- hereda del líder histórico de la Revolución, Fidel Castro, y de Raúl Castro. Los encuentros con la población devinieron muestras de cariño y simpatía, además de ratificar el apoyo de los cubanos a la continuidad de la Revolución bajo un nuevo liderazgo.
En cada uno de los recorridos por el país estuvo acompañado por ministros, funcionarios y directivos, equipo con el que chequeó las tareas priorizadas en los sectores económico y social, a partir del beneficio que representan para el pueblo de la Isla.
Díaz-Canel abordó con los trabajadores de diversos centros el papel que corresponde desempeñar a la empresa estatal socialista, a la que se le debe facilitar su desarrollo, para lo cual está llamada a la búsqueda de diversas vías que lo impulsen.
Para ese objetivo recordó que Cuba cuenta con suficientes profesionales altamente capacitados y debe aprovechar todas sus potencialidades, incluyendo las científico-técnicas.
Debemos hacer todo lo posible por alcanzar un resultado mayor, en dependencia de nuestras condiciones económicas, dijo.
POR EL PAÍS
En la occidental provincia de Matanzas recorrió en julio el centro histórico de la ciudad y revisó la marcha de obras relacionadas con el desarrollo socio-económico y el 325 aniversario de la fundación de San Carlos y San Severino de Matanzas, que se celebró el 12 de octubre.
También acudió a instalaciones culturales, industrias, obras en construcción y empresas en las que preguntó sobre los planes de producción, los cronogramas de ejecución y su papel en el avance del territorio y de la nación en general.
En la llamada ciudad de los puentes, se interesó por obras sociales como la reparación del teatro Sauto.
También en el extremo del occidente cubano, la provincia de Pinar del Río, recorrió centros productivos y docentes, donde mantuvo el estilo de dialogar con los trabajadores, los estudiantes y la población en general.
En la Universidad de Pinar del Río participó en una de las 133 mil reuniones celebradas en la isla entre el 13 de agosto y el 15 de noviembre en el proceso de reforma de la Constitución.
Una de las prioridades de sus visitas a las provincias del país fue el seguimiento al desarrollo y las producciones locales, en particular de materiales de construcción para el programa de construcción y reparación de viviendas, muchos de ellos subsidiados para beneficiar a la población más vulnerable.
Al respecto, llamó en suelo pinareño al enfrentamiento al delito y abordó preocupaciones como los inventarios ociosos, las dificultades con los materiales que limitan la culminación de los subsidios y la disponibilidad del servicio de pago mediante tarjeta magnética.
Por el centro del país, el jefe de Estado estuvo en julio en Cienfuegos, donde -publicó el diario Granma- se produjo un momento maravilloso, de esos que quedan en la retina para siempre, porque definen la identificación real de un pueblo con sus líderes.
En pleno parque Martí, el corazón de la ciudad, una multitud se le abalanzó entre muestras de cariño, confraternidad y apoyo hacia el dirigente, quien escuchó frases como 'Siga así', 'Lo queremos, lo queremos mucho', 'Viva Díaz-Canel', 'Estaba loca por verlo'!.
Lo besaron ancianos y niños, muchos le tendieron la mano, otros pretendían chocarle los nudillos en señal de aprobación a su gestión de gobierno, su estilo de trabajo e incansable esfuerzo por participar en cada momento decisivo de la vida política y social de este país. A la manera de Raúl. A la manera del inolvidable Fidel.
No podía faltar su acercamiento a los habitantes de la oriental Santiago de Cuba, en un viaje que incluyó la visita al poblado de El Cobre, ubicado en las inmediaciones de la cadena montañosa Sierra Maestra.
Allí el mandatario constató la ejecución de obras dirigidas al desarrollo turístico, entre ellas el hotel que lleva el nombre de la localidad, la cual acoge al Santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre, lugar visitado a diario por miles de cubanos y extranjeros.
Al intercambiar con los santiagueros en junio, abogó por la permanente movilización del pueblo en defensa de la Revolución.
Un momento que recordó al líder histórico Fidel Castro, fue su presencia en la secundaria básica Armando García, en el reparto Chicharrones, donde jugó baloncesto con estudiantes, un deporte mediante el cual Fidel confraternizó muchas veces con cubanos de diversas generaciones.
En Holguín, otra provincia del oriente cubano, muchos de sus ciudadanos fueron sorprendidos en agosto cuando el jefe de Estado llegó a las mesas de los comensales que se encontraban disfrutando del proyecto de desarrollo local Rincón de las Romerías y se interesó por la calidad de los servicios recibidos allí.
El joven Luis Mario Guerrero contó al diario Juventud Rebelde su experiencia con el presidente.
'Estaba conversando con mi esposa en el Rincón de Romerías cuando, alrededor de las cuatro de la tarde, veo que entra Díaz-Canel. No es que uno se encuentre diariamente al Presidente por la calle; así que, lógicamente, uno se pone nervioso y se emociona, sobre todo si respetas a esa personalidad. Entonces él empezó a saludar a todos y, cuando se me acercó, quise tirarme una foto', explicó.
De acuerdo con Guerrero, le pidió una foto al mandatario y este le puso la mano en el hombro y la respondió: 'Yo no soy tu Presidente, soy tu compañero'. El joven manifestó orgullo por ese momento.
En Holguín, recorrió el casco histórico, ocasión aprovechada por los lugareños para saludarlo.
Al intervenir el 22 de diciembre en la clausura del segundo período ordinario de la IX Legislatura de la Asamblea Nacional, el presidente llamó a trabajar con compromiso para la solución de los problemas que más preocupan al pueblo, 'que son los que absorben cada minuto de nuestros días y cada partícula de nuestras energías'.
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