Concluye con éxito el II Encuentro “Conocer la habanera”

El II Encuentro “Conocer la habanera” fue clausurado este domingo en la Sala Covarrubias del Teatro Nacional con la celebración de un concierto de la Orquesta Sinfónica Nacional bajo la dirección del maestro Enrique Pérez Mesa que contó con interpretaciones de la solista soprano Bárbara Llanes.

El Encuentro sobre Habaneras en su segunda edición discurrió entre el 13 y el 16 de diciembre en La Habana coordinado por el maestro Dr. Cecilio Tieles quien contó con el apoyo organizativo del Museo Nacional de la Música y el Instituto Cubano de la Música.

El evento cultural tuvo el propósito de promover el significado patrimonial del género como uno de los exponentes universales de la música cubana y para ello se desarrollaron conciertos en la Iglesia de Paula, el Colegio San Gerónimo de La Habana, el Museo Nacional de Bellas Artes , el Teatro nacional y el Teatro América.

También auspició un evento teórico para conocer más de las condiciones sociales y culturales que favorecieron el surgimiento de una de las manifestaciones artísticas más importantes de la cultura cubana que dieron como frutos posteriores, como certeramente apuntó Alejo Carpentier, hablando de Manuel Saumell, el “danzón (La Tedezco), de la guajira (segunda de La Matilde), de la clave (La Celestina), de la criolla (segunda de La Nené), y de ciertas modalidades de la canción cubana (segunda de Recuerdos tristes)”.

En la sesión científica prestigiosos estudiosos del siglo XIX cubano continuaron la indagación de las raíces de la habanera en nuestra Cuba y la situación de la misma en Francia o España.

Según nos declaró el maestro Tieles podemos decir que la habanera es el primer género musical cubano. La influencia de la habanera, del llamado ritmo tango —que no es el único ritmo de la habanera—, trasciende las fronteras de Cuba y de España generando nuevas maneras de expresar como pudiera ser el jazz o el tango.

El evento mostró la habanera como expresión popular, lírica y de concierto, no solo en Cuba, sino en España o Francia. Este II Encuentro contó con importantes novedades, como la participación de la Orquesta Sinfónica Nacional y una gala dedicada a la vertiente popular.

Tieles considera que han sido días de intensa actividad combinando conciertos que han demostrado que la habanera no es aburrida como algunos dicen, sino, al contrario, es rica y varia.

“Hemos escuchado desde las populares hasta las más elaboradas, francesas, españolas, cubanas o italianas. Estamos muy agradecidos al maestro Enrique Pérez Mesa, la Orquesta Sinfónica Nacional, así como a nuestra soprano Bárbara Llanes, que nos permitió hacer otro recorrido por las diversas maneras de hacer este género”.

Asimismo, este domingo cerramos el ciclo de la habanera popular con una Gala en el Teatro América.

Para el conocido pianista estos Encuentros van ganando interés fuera de nuestras fronteras y en este tuvimos numerosa delegación catalana integrada por Xavier Pardina y Elisa Viura, el Trío Iberia, con Indira Ferrer-Morató, Manuel Ruiz y Carlos Murias y la francesa por Jean-Paul Martín y Doris Stiegler.

En la sesión científica pudimos intercambiar y debatir opiniones sobre la habanera y las circunstancias sociales y culturales que propiciaron su creación; conocimos del estado de las habaneras en Francia y España. “Algo muy importante para enriquecernos mutuamente. En resumen: ha sido un Encuentro exitoso”, dijo.

Estima el maestro que la habanera es expresión de nuestras raíces culturales y sociales, desde el punto de vista musical, es heredera de la contradanza habanera y hunde sus raíces en el siglo XVIII.

“Es el primer género creado en La Habana por músicos negros cubanos, quienes dominaban, entonces, las artes, como lo señalo en 1834, José Antonio Saco. De modo que es cubano por los cuatro costados”, subrayó.

Comparto la opinión del compañero Jesús Gómez Cairo, Premio Nacional de la Música y Presidente del Comité Organizador de este II Encuentro expresada en ocasión de la inauguración del evento La música Romántica Hispano-Cubana del siglo XIX, dedicado a Nicolás Ruiz Espadero: (…) “nada existe más inclusivo, aglutinador y recreativo, con respecto a otras culturas del mundo, que la música cubana, desde entonces, desde antes y hasta nuestros días.”

Agradeció el apoyo de la Oficina del Historiador de la Ciudad, el Gabinete de Patrimonio Musical Esteban Salas, el Centro Nacional de Música de Concierto, Museo de Bellas Artes, la Empresa Adolfo Guzmán, la Orquesta Sinfónica Nacional, la Dirección Provincial de Cultura de La Habana, la Associació Cultural Catalano-Iberoamericana y la Colección Por Cuba rostros de habaneras.

Igualmente reconoció la contribución decisiva de todos los artistas, estudiosos e invitados extranjeros que hicieron posible este evento y su éxito.