Fotógrafa norteamericana exhibe retratos de Escuela Cubana de Ballet
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La muestra fotográfica presenta más de una veintena de imágenes de mediano y gran formato, que apresan con agudeza múltiples aspectos del ritual cotidiano de clases y ensayos en la Escuela Nacional de Ballet (ENB) de Cuba.
Al decir del historiador de la principal compañía de danza clásica del país, Miguel Cabrera, esta exposición además de constituir valioso testimonio, es un tributo a la rica herencia de la institución y muestrario de la inagotable levadura que habrá de nutrir el futuro del ballet cubano.
Bowman, sensible artista del lente, confió en el realizador audiovisual cubano Roberto Chile para la curaduría de esta colección adscrita a las actividades colaterales del 24 Festival Internacional de Ballet de La Habana, que se inaugurará mañana bajo la dirección de Alicia Alonso.
Los estudiantes de la ENB participarán en el desfile inaugural y en una serie de clases magistrales ofrecidas por maestros nacionales y extranjeros en homenaje al padre del ballet cubano, Fernando Alonso.
Artistas de unos 25 países actuarán en los teatros Nacional, Karl Marx y Mella, de La Habana, hasta el próximo 7 de noviembre.
Como parte de las actividades colaterales del 24 Festival, el pintor cubano Miguel Angel Quintana presentó ayer una colección pictórica alusiva al legado del célebre dramaturgo William Shakespeare, a quien está dedicada la edición 24 del evento.
Un día antes, el libro de fotos Habana sensual, del periodista cubano Gabriel Dávalos, se agotó minutos después de su presentación en el Museo Nacional de la Danza.
La obra refiere algunas de las cualidades que sitúan a la escuela cubana de ballet en una posición destacada a nivel mundial y revela mediante la danza lo esencial de una ciudad, a modo de crónica social.
Por su parte, la exposición fotográfica En buenas manos, el ballet, permanecerá durante todo el evento en el vestíbulo de la sala Avellaneda, en tributo a la artista cubana más universal, Alicia Alonso, y varias de las principales figuras del Ballet Nacional de Cuba en la actualidad.
En el piso superior del teatro, podrá apreciarse también la muestra de cerámica titulada Del boceto a la otra mirada, del artista de la plástica cubana Landy Mesis, sobre algunos de los trabajos escenográficos de los diseñadores de ballet Salvador Fernández y Ricardo Reymena.
Mesis trabajó la técnica del tencradís, que en catalán significa quebradizo o roto, y es una especie de mosaico realizado con fragmentos cerámicos unidos.
Simultáneamente, el vestíbulo del Teatro Karl Marx exhibirá una exposición de la fotógrafa hispano boliviana Pilar Rubí en torno a las posibilidades ilimitadas de los cuerpos de los bailarines, a partir de una serie de fotos hechas a danzantes en Cuba.
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