"¡Háganlo por mí!"

"¡Força Neymar!" es el mensaje que se repite en las calles, en las redes sociales y en los medios de comunicación para darle apoyo al jugador tras la fractura de vértebra que sufrió por la entrada de Camilo Zúñiga en la victoria 2-1 de Brasil ante Colombia en los cuartos de final.

Cientos de aficionados se acercaron a las puertas de la urbanización Acapulco, donde el ídolo tiene casa en Guarujá, para acompañarle en el difícil momento que atraviesa. La Copa del Mundo acabó para él y la última imagen que dejó fueron los gestos de dolor que mostraba mientras abandonaba en camilla la cancha del estadio Castelao de Fortaleza.

El dolor que sentía Neymar es el mismo que sienten millones de hinchas en el país anfitrión del Mundial, que se hacen una pregunta ineludible: ¿Brasil puede ser campeón sin él?

La interrogante atormenta a la afición y destrozó en mil pedazos la euforia vivida por la clasificación a semifinales, dándole alas a la preocupación por el destino del equipo de Luiz Felipe Scolari. Lees la prensa: Neymar. Enciendes el televisor: Neymar. Prendes la radio: Neymar. Vas a la esquina: Neymar. Todo el mundo habla de la baja del astro del FC Barcelona.

Ayer, Neymar abandonó en helicóptero, inmovilizado en una camilla, la Granja Comary, sitio de concentración de la canarinha en las proximidades de Río de Janeiro, para cumplir en Guarujá, en el litoral de Sao Paulo, a una hora por carretera de la capital paulista, el reposo de cuatro a seis semanas que necesita. Allí busca, entre las playas de la zona, tranquilidad.

Las cámaras de TV, en medio del revuelo en Granja Comary, captaron la última señal de despedida del jugador hacia sus compañeros en el scratch, con el pulgar de la mano derecha levantado mientras él estaba recostado. Parecía decirles: "Todo bien. Tranquilos".

Pero la realidad es que las cosas no están bien para Brasil luego de su lesión. Neymar había sido la gran figura del equipo de Luiz Felipe Scolari en la campaña por el hexacampeonato mundial. Sus cuatro goles no son suficientes para reflejar lo que él significaba. Todo el juego pasaba por él.

Scolari, en la rueda de prensa que ofreció en Fortaleza tras el compromiso contra la colombianos, se quejó con amargura por lo sucedido. Dijo que Neymar había sido "cazado" y le pedía a los árbitros proteger más a los jugadores de talento. "Salió a ser cazado y ahora está en un hospital", comentó.

Hablaba Felipao del hospital de Sao Carlos, en Fortaleza, donde Neymar fue atendido después del partido. Allí, a 2.400 kilómetros de distancia de Guarujá, también estuvieron cientos de fanáticos dándole apoyo al joven de 22 años el viernes en la noche.

El jugador, entre las muestras de apoyo, grabó un video en el que aseguró, con los ojos enrojecidos, que el sueño "no ha terminado" para él. "Mis compañeros harán todo para que yo pueda realizar mi sueño, que es ser campeón mundial".