Presidente Obama: Tocan a la puerta...

Una asociación de formaciones comunitarias dio a la Cámara de Representantes un plazo hasta el próximo 28 de junio para que apruebe una reforma migratoria.

De no hacerlo, previno, multiplicarán las protestas en distintos lugares del país.

Observadores agregaron que tal disposición se encuentra estancada por la mayoría republicana de esa Cámara Baja.

Los actuales 16 huelguistas de hambre en predios de la Casa Blanca incluyen, por ahora, a personas procedentes de Massachusets y Nueva Orleáns.

Remplazarán a otras cuatro  estacionadas en la Plaza Lafayette (frente a la Mansión Ejecutiva) que soportaron igual rigor desde el día ocho de abril.

Una participante, Santos Gutiérrez, declaró a la AP que ayunará porque a su esposo hace cinco meses lo detuvieron  y ella no tiene cómo mantener a sus tres hijas.

"Varios en mi familia votaron por usted, pero usted incumplió su promesa de lograr una reforma migratoria", dijo la guatemalteca de 47 años, supuestamente hablando con Obama.

Medios de prensa informaron que, con motivo de este asunto, varios sindicatos se aprestan a esgrimirlo en manifestaciones por el primero de mayo.

El antecedente de esa profunda controversia hay que buscarlo en un compromiso electoral no cumplido por el mandatario estadounidense.

Lo recordó BBC Mundo, el 18 de octubre de 2012, al preguntar si  las  promesas del Obama candidato a los latinos, “¿se cumplieron o decepcionaron?”

En 2008, añadió- “una mayoría abrumadora” de hispanos salió a votar por el aspirante presidencial demócrata, entusiasmados por su  oferta de auspiciar y promover una Ley de Reforma Migratoria.

Pero, siguió diciendo, tres años y medio después, seguían igual unos 11 millones de indocumentados y eran deportados en cantidades sin precedentes.

Obama intentó suavizar lo acontecido echando mano a ciertos objetivos económicos,  de salud, vivienda y otros, pero no logró sepultar el malestar vinculado a la incumplida reforma migratoria.  

El 18 de septiembre de  2008, ya cercanas aquellas elecciones,  habló en un programa de la cadena Univisión, con amplia audiencia hispana.

Allí señaló la necesidad de tener  un  plan completo de inmigración que "provea a los trabajadores indocumentados una avenida hacia la ciudadanía".

Ganó los comicios. Durante su discurso de victoria en Chicago reiteró que promulgaría una reforma migratoria.

En su primer año de administración no lo hizo, como  tampoco en el segundo cuando tenía una mayoría demócrata en el Capitolio.

Ni hasta llegar a la presente huelga de hambre a unos metros de la Oficina Oval de la Mansión Ejecutiva.
¿Qué les faltaría? Un toque a la puerta solicitando hablar con el Presidente del país todavía más rico del mundo.