Mujica dice García Márquez sigue vivo en la esperanza de la gente
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Dijo que aunque su muerte siempre va a dejar un vacío, García Márquez "va a seguir viviendo de otra manera en la esperanza de la gente y los jóvenes cuando de asomen al mundo de los sueños".
América Latina perdió a un gran referente como escritor y también a un compañero de las utopías que los hombres soñamos y que dan sentido a nuestras vidas, agregó.
Para quienes soñamos con un mundo mejor, dijo, es uno de los más grandes puntos de referencia en materia de su verdad, su dolor, su alegría y pienso que es un dibujo tendido hacia el porvenir.
En declaraciones a la televisión uruguaya, reveló que descubrió la obra de García Márquez en prisión y que, durante varios años sin poder leer un libro, soñó con las mariposas creadas por el colombiano. Acudí a él en mi soledad, sostuvo.
Al describir la imaginación del Premio Nobel de Literatura como prodigiosa, recordó que supo pintar parte de nuestra historia latinoamericana y resaltó su capacidad de "poder transmitir en pocas frases cosas que de otra manera necesitarían un tratado".
Por otro lado, todos los medios uruguayos, escritos, radiales, televisivos y electrónicos lamentaron hoy el fallecimiento de García Márquez.
Entre muchos titulares de portada, destaca uno del diario El Observador en el sentido de que "la literatura mundial (está) condenada a cien años de soledad".
El País, por su parte, lo describió como "el mejor novelista en lengua castellana del siglo XX" y también le dedicó espacio a una nota que recuerda al escritor como "maestro de periodismo".
La República destacó en su portada un "Adiós a Gabriel García Márquez", recordando toda su trayectoria, y el portal electrónico El Espectador comentó que "el mundo llora la muerte de GGM".
El País (Uruguay) reprodujo una crónica de GGM, publicada en El País de España el 9 de diciembre de 1980, tras la victoria del "No" en el plebiscito realizado aquí contra la dictadura uruguaya.
El texto señala que en ese momento los militares "parecían dueños de todo su poder, con la prensa comprada, los partidos políticos prohibidos, la actividad universitaria y sindical suprimida y con media oposición en la cárcel o asesinada por ellos mismos, y nada menos que la quinta parte de la población nacional dispersa por medio mundo".
Igualmente, cita menciones que García Márquez hizo del Uruguay durante su discurso al recibir el Premio Nobel en 1982: "El Uruguay, una nación minúscula de dos y medio millones de habitantes que se consideraba como el país más civilizado del continente, ha perdido en el destierro a uno de cada cinco ciudadanos".
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