Domadores-USA Nockouts: Pie derecho y a todo tren en la “hoguera” de los cuartos

Se podía ver desde el desenlace airoso inicial de Gerardo Cervantes (52) sin pasar de la báscula hasta la lección del súper completo Yoandi Toirac al “sueco” Mohammed Sallah, quien en definitiva apenas pudo pasar de eso sobre el cuadrilátero, de hacerse el sueco. Y como el boxeo y Suecia no tienen mucho que ver…

Un comienzo pasivo marcó el accionar de Lázaro Álvarez (60) sobre el encerado. Fue calibrando a su rival, el venezolano Luis Arcón, quien se plantó a dar batalla. Pero el doble titular del orbe entró en ritmo y a pesar de no mostrar su contundencia habitual sacó la mejor parte. Ciertamente la pelea transcurrió por cauces de enredo, afloraron los agarrones y las intervenciones de la imparcial. Con todo y lo accidentado del pleito el pinareño de 23 años impuso su casta por 50-45, 49-46, 49-46. Así, esta vez la visita del morocho distó de parecerse a la del 2013, cuando en su estreno internacional en la categoría elite derrotó al antillano Pablo Vicente y se apoderó del cetro.

“Fue un combate enredado pero la estrategia consistió en ir ganando asalto por asalto. Me compliqué un poco en el tercero, y justo ahí reaccioné para lograr el veredicto y demostrar mi calidad”,  sentenció Álvarez, quien aún preserva inmaculado el casillero de las derrotas y ha impuesto el régimen de sus puños en cinco pleitos.

Calidad sobrada, intercambios propuestos desde el gong inicial entre el as olímpico Roniel Iglesias y el bronce de Almaty 2013, el también venezolano  Gabriel Maestre (69kg). Pero la receta de Roniel fue milimétrica, asestando estocadas con su zurda prohibida, movie3ndo el torso para burlar los golpes de su oponente a su antojo. Hasta que en el tercer asalto… estalló la dinamita de su siniestra: gancho al hígado de Maestre, este hincó sus rodillas y soltó el protector bucal sin poderse reponer. No más combate, no más aire en el tanque de Maestre.

“Hemos trabajado día a día sobre el golpeo preciso, lo necesitamos en estos combates de mayor intensidad, a cinco asaltos. Tuve la oportunidad de estudiar su duelo semifinal en el Mundial con Arisnoidys y desde el inicio me propuso un combate interesante. No esperábamos un veredicto antes del final, pero si salió el KO técnico es otra señal de nuestra forma y lo ambiciosos que estamos respecto a la final de la Serie Mundial. El resto de las energías y estrategias las desarrollaremos en cada sesión. Estos resultados siempre son una inyección de energía para el equipo”, sentenció con una ráfaga de palabras cual si fueran golpes el mejor boxeador libra por libra de la escuela cubana de boxeo en la actualidad.

El retorno de un grande, bien pudiera ser ese el título para el desenvolvimiento de Emilio Correa sobre el encerado. Superior en toda la ruta al brasileño Michel Borges de Sousa (81 kg) sin importarle los dos años que estuvo sin desarrollar pleitos de mayor envergadura, ni la condición de flamante monarca de los Juegos Odesur 2014 de su adversario. Su golpeo mejor, pese a no contar con la movilidad que exhibía en los 75 ni esa capacidad para entrar y hacer mella en la anatomía rival que siempre lo caracterizó. Este es un boxeo diferente como bien él mismo dijera y los intercambios son una de las esencias. También dijo aquí estoy yo el cansancio a la altura del cuarto round. Lentitud, disminución de la efectividad, pérdida de movilidad por ambos púgiles devinieron ingredientes. Pese a todo Correa sacó la mejor parte y merecido el veredicto final de 49-46, 49-46 y 50-45.

“Enfrenté a un boxeador de calidad, muy fuerte físicamente y pude notar que pese a mis golpes efectivos en ocasiones, lograba recuperarse con facilidad. El ritmo mío habitual no declinó, pues suelo pesar entre 78-79 kilogramos y aún cuando no estoy al 100% mi preparación para esta reaparición fue muy buena. Sentir nuevamente el respaldo del público acá en casa ha sido una sensación muy grata y a la vez de presión, porque no podía permitirme defraudarlos. Sea cual sea la decisión del colectivo técnico Correa está listo para pelear, no importa si en 75 u 81”.

Para Toirac, as universal juvenil, va siendo hora de comenzar a labrarse su camino entre los grandes y si su demostración ante Sallah sirvió como pie forzado en su camino a lograrlo, bienvenida sea. Contundente ante un rival que no mostró más allá de sus dimensiones ninguna jerarquía entre las cuatro cuerdas. El veredicto entonces no podía ser otro que unánime 50-44, 50-45, 50-44, luego del “fongueo” practicado por el capitalino de 19 abriles, 1.90 de estatura y natural de Santiago de las Vegas.

Entonces, tal y como sucedía en los topes de antaño entre Cuba y Estados Unidos, haciendo valer el saldo abrumador de 26 victorias y un empate en ellos, ya sea en español  o en inglés, señor o mister: ¡GO HOME!