Se trata de dos deidades terrenales de la interpretación: Omara Portuondo, reconocida en México por ser la voz de la agrupación cubana Buena Vista Social Club, y Regina Orozco, actriz e intérprete dueña de una portentosa voz, quienes repetirán la explosión de dopamina al defragmentar ese órgano que late, en el concierto denominado Pedazos del corazón, espectáculo basado en canciones de Agustín Lara y Álvaro Carrillo, históricos autores mexicanos que son sinónimo de amor.

Lo ofrecerán el próximo sábado en el teatro Metropólitan, donde serán acompañadas por una orquesta de cámara.

La presentación es un remake de la que ofrecieron el año pasado en el Faro de Oriente y en una gira por Morelos y Guerrero.

El repertorio fue elegido "con base en la maravilla de la voz de Omara", quien cuando canta "la música baja en ella. No hay manera de saber racionalmente cómo interpretará una pieza... Cuando canta, directamente baja Diosito y ella hace música. No he escuchado a una intérprete con esa magia; en cada espectáculo interpreta de forma diferente la misma canción. Cuando la escucho, en vez de cantar con ella, deseo estar entre el público", comentó este martes Orozco en una reunión con la prensa en el vestíbulo del recinto del Centro histórico.

Arráncame la vida, Un poco más, Sabrá Dios, Solamente una vez, Señora Tentación, Sabor a mí, La cumbancha, Noche de ronda y Aventurera, por mencionar algunas canciones, son piezas de estos compositores que emanarán de las cuerdas vocales de estas damas que derraman felicidad.

"No se pueden perder"

"Agustín Lara y Álvaro Carrillo se tienen que hacer en la vida", coinciden la cubana y la mexicana.

Se refieren a que cualquier cantante que diga serlo, tiene que interpretar a estos monstruos de la canción popular, porque "su poesía y su música están llenas de pasión".

“¿Quién no ha oído Guantanamera?”, preguntó a los periodistas la sensual habanera, conocida como La novia del filin.

Se respondió: "Lo mismo pasa con las canciones de Lara y Carrillo: no se pueden perder porque son parte de la cultura de este país. Es importante que se sigan retomando, porque eso, sin forzarlo, hará que a los jóvenes les interese. Es necesario cantarlos, porque yo, aunque no soy de este país, se que son autores reconocidos en el mundo por sus magníficas y bellas canciones: tienen texto, líneas melódicas; tienen todo".

Omara es querida en México. Es ya una habitual de sus foros luego de su despunte como cantante del Buena Vista Social Club, que realizará este año una gira de despedida con los miembros que aún existen. Algunos ya se nos adelantaron, como popularmente dicen.

Décadas atrás Portuondo se presentó en México con su hermana Haydee, Elena Burke y Moraima Secada: el cuarteto vocal Las D’Aida (dirigido por el pianista Aida Diestro), el cual compartió escenario, entonces, con El tenor continental Pedro Vargas. Incluso conoció a Lara en uno de los viajes que éste hizo a Cuba.

Para Regina Orozco hacer este concierto es de un gusto enorme. Primero, porque admira la carrera de Omara y segundo, porque "los jóvenes empiezan a tener gusto por la palabra, por la palabra bien dicha, que es lo que tienen las canciones de Lara y Carrillo".

A su vez, la siempre simpática Omara asegura que Pedazos del corazón será un espectáculo para que el público salga satisfecho. "El arte es algo que nace con uno mismo. Yo tengo la suerte de cantar. Desde niña aprendí gracias a mis padres que me dijeron que la música es algo importante. Decidí ser intérprete y, pues, aquí estoy".

Orozco, por su parte, adelantó que este mismo año editarán un disco de estudio con los temas que interpretarán en el concierto, "no hay fecha exacta para el lanzamiento, pero ya lo estamos grabando", afirma.