Cuba se alista para enfrentar eventualidades climatológicas
especiales
El 1 de junio comenzó la temporada ciclónica en el Atlántico, desafío que impone la naturaleza para el cual Cuba desarrolla acciones encaminadas a enfrentar el impacto de huracanes y otros desastres extremos.
Recientemente, el Instituto de Meteorología de Cuba (Insmet) y otros centros científicos especializados en esta disciplina en la región informaron sobre la posibilidad de que la mayor de las Antillas viva una etapa muy activa en el año en curso, teniendo en cuenta las condiciones oceánicas y atmosféricas.
La temporada, que se extenderá hasta el 30 de noviembre, trae al menos 17 eventos climatológicos acompañados de fuertes vientos, intensas lluvias y penetraciones del mar en las zonas bajas costeras.
A juicio de la experta del Centro de Pronósticos del Insmet, Maritza Ballester, pueden formarse fenómenos con vientos máximos superiores a 63 kilómetros por horas, y nueve de ellos rebasarán los 117, adquiriendo la categoría de huracán.
El primero de los fenómenos llevará el nombre de Andrea, luego Barry, Chantal, Dorian, Erin, Fernand, Grabielle, Humberto, Ingrid, Jerry, Karen, Lorenzo, Melissa, Nestor, Olga, Pablo, Rebekah, Sebastien, Tanya, Van y Wendy.
Aunque estos nombres de damas y caballeros aún no lo podamos recitar de memoria, Cuba recuerda hoy la tragedia protagonizada por Sandy en la temporada pasada.
Dicho meteoro, que impactó la isla en octubre último, fue responsable de pérdidas humanas, estragos al fondo habitacional, daños millonarios a la economía nacional -en especial a la agricultura-, el sector eléctrico y de las comunicaciones.
Sandy azotó el oriente cubano con vientos sostenidos de 185 kilómetros por hora y rachas superiores a los 200, provocando severos daños con sus fuertes lluvias e inundaciones asociadas.
A partir de este hecho y de anteriores afectaciones, la nación antillana labora en la preparación de la población en el enfrentamiento a los huracanes de alta intensidad y otros desastres extremos, con la premisa de priorizar la vida humana y los recursos del país.
METEORO-2013
En tal sentido, autoridades cubanas y la población civil desarrollaron en mayo el ejercicio Meteoro 2013, iniciativa anual que se realiza desde 1986 con el objetivo de practicar acciones de prevención y compartir experiencias.
El Estado Mayor de la Defensa Civil señaló que la reciente edición estuvo dedicada a los órganos de dirección y mando de todos los niveles que puntualizaron la información sobre la eficacia de las acciones adoptadas en el 2012 para reducir riesgos en los territorios y en entidades económicas.
También fue evaluada la objetividad de todas las medidas de respuesta y los papeles de las instituciones de vigilancia.
En la jornada final del ejercicio fue instrumentada la movilización masiva de la población para enfrentar situaciones de desastre.
Tareas de evacuación, el seguimiento a la situación de presas y embalses, el traslado de recursos a lugares seguros, el rescate de personas y otros escenarios fueron evaluados durante el ejercicio.
Además, fueron realizadas tareas como la poda de árboles y la limpieza de barrios y ciudades, con el apoyo de la población.
PRIORIDAD DE SALVAR LA VIDA HUMANA
En una entrevista concedida con motivo del 50 Aniversario de la Defensa Civil cubana, el jefe de Estado Mayor Nacional del ente, Ramón Pardo Guerra, subrayó que la esencia del trabajo es salvaguardar los ciudadanos, sus bienes personales y los recursos de la economía.
Aclaró que el sistema -estructurado por leyes decretos y directivas- está activado de manera permanente.
Los fenómenos más recurrentes son los ciclones tropicales, muchos de ellos con gran poder destructivo; ejemplo de ellos fueron Michelle, Gustav, Ike, Paloma y Sandy, recordó el general de División.
Empero también respondemos ante penetraciones del mar, maremotos, terremotos, incendios forestales e industriales, grandes sequías, derrame de hidrocarburos, enfermedades humanas y plagas en las plantaciones, explicó Pardo Guerra a la revista Defensa Civil.
Debemos mejorarlo todo -indicó-, pues cada jornada obtenemos distintas experiencias, hecho que permite revisar, actualizar, perfeccionar los planes de trabajo.
Según el general de División, Cuba es visitada por diferentes delegaciones, presidentes, vicepresidentes para intercambiar experiencias sobre la prevención y reducción de desastres.
Al respecto, hemos acogido varios eventos con una notable asistencia de participantes, precisó.
Actualmente -destacó Pardo Guerra- contamos con protocolos de intercambios, además de pertenecer a la Asociación Iberoamericana de Organismos Gubernamentales de Protección Civil y al Comité Especial de Desastres de los Estados del Caribe.
El funcionario participó en Ginebra, Suiza, en la Cuarta Plataforma Global para la Reducción del Riesgo de Desastres, encuentro celebrado a finales de mayo.
Durante el foro, Pardo Guerra compartió las experiencias de Cuba y reiteró la disposición de apoyar a otros países y organizaciones en la prevención y reducción de desastres.
Añadir nuevo comentario