Nada mejor que tratar con los de casa, una máxima de Barry Larkin en el debut de Brasil frente al favorito Japón en el inicio mañana sábado del grupo A del III Clásico Mundial de Béisbol.

Al menos eso parece en el papel. Larkin, Salón de la Fama de las Grandes Ligas estadounidenses, dio la sorpresa al traer a Brasil al máximo torneo de la disciplina y ahora quiere más. Su lanzador de apertura será Rafael Fernándes.

Derecho de 1,80 de estatura, buena velocidad y experiencia de dos temporadas con los profesionales nipones del Tokyo Yakult Swallows, fue el abridor hermético contra Panamá en la lid clasificatoria.

La elección de Fernándes deja sin dudas para Cuba al ascendente joven de 24 años André Rienzo, quien pertenece al franquicia de los Medias Blancas de Chicago, aunque su desarrollo ha sido básicamente en la Doble A.

"Para nosotros es igual. Estamos preparados para enfrentar a cualquier pitcher. Nuestra preocupación es desarrollar nuestra estrategia de juego y no perder oportunidades. Queremos llegar a la final, pero antes hay que vencer a Brasil", dijo Víctor Mesa.

El manejador de la selección cubana recalcó que cada detalle es importante para la conquista de la victoria y se manifestó satisfecho con la remontada de su equipo 10-8 en el último cotejo de fogueo, ahora ante los Halcones del Fukuoka Softbank.

Japón es el monarca de los dos Clásicos anteriores (2006 y 2009) y para el desperezo en el Fukuoka Yafuoku Dome apelará al derecho Masahiro Tanaka, ganador del premio Eiji Sawamura (equivalente al Cy Young) de los serpentineros en las Grandes Ligas japonesas.

De notable velocidad (más de 90 millas) y una slider filosa, Tanaka (1,88 metros y 25 años) es también una decisión clara del manager Koji Yamamoto de que no quiere correr riesgos en el inicio de una competencia corta e intensa.

Los suramericanos dirigidos por Larkin saben que las opciones de batir en casa a Japón son escasas, si bien harán el esfuerzo. Sin embargo, todo indica que el zorro de Larkin ahorrará balas para tenerlas listas contra Cuba el domingo.

En la jornada inaugural del certamen en la llave B de Taichung, Taipei de China, los anfitriones rivalizarán con Australia, y Corea del Sur lo hará con Holanda el propio sábado.