20 años del Trabuco de Manolito Simonet: música sin freno

Sin freno (Bis Music) será el disco que Manolito Simonet presentará próximamente para celebrar los 20 años de su orquesta El Trabuco, y para ello comienza festejando con un gran concierto en el Karl Marx.

Invitados como Germán Velasco en el saxofón, el trompetista estrella Alexander Abreu y el cantante Jorge Luis Robaina del grupo Karamba, compartirán el próximo viernes 1 de marzo con el popular salsero este aniversario.

El nuevo álbum rinde homenaje a La Aragón, antológica orquesta cubana de la cual Manolito se siente eterno deudor. El CD presenta la nueva generación del Trabuco y retoma un poco la sonoridad de Se rompieron los termómetros, o sea, que es un disco para bailar casino, afirmó Manolito a la prensa.

La cuenta no da y Déjala que siga son algunos temas de Sin freno ya conocidos por el público.  

Aunque el lanzamiento oficial será al concluir una gira nacional del grupo en abril, representantes de la disquera anunciaron que en el concierto se ofrecerá un single con algunos de los números más representativos de la nueva producción. Durante el espectáculo se grabará un DVD que será publicado igualmente por Bis Music.

Precisamente, el título del álbum refleja el acierto con que Manolito ha dirigido su banda. Este pianista, que además domina la percusión, la guitarra y el bajo, se dio a conocer en la orquesta Maravillas de Florida, en Camagüey. De allá vino a La Habana con un grupo de músicos amigos para crear lo que es hoy El Trabuco, una verdadera arma de fuego musical.

Se aventuraron a crear una orquesta en un momento crítico de la historia de Cuba, en pleno «período especial», año 93. Llegaron sin saber qué pasaría y aquí se quedaron porque el público los aplaudió.

Cuenta Manolito que gracias al apoyo de la empresa promotora de música Benny Moré y los directores de orquestas que estaban en la preferencia en ese momento, en especial Elito Revé y Juan Formell, se hicieron de instrumentos musicales.

La carrera de Manolito podría decirse ha fluido «sin freno». Él cumplió con la fórmula perfecta de llegar y saber mantenerse. Parte de su secreto está en la mezcla de metales y violines que le han dado una sonoridad de distinción al Trabuco.

Pone a bailar lo mismo a los latinos que a los nórdicos. Nadie puede quedarse quieto con su tumbao porque la música que él hace sonar es auténticamente cubana, mezcla de tradición y de herencia de grandes maestros con la contemporaneidad.

En estos 20 años, «el huracán bailable», como también se le conoce, ha recorrido unos 30 países y cada año ha participado en los festivales más importantes de Europa y América. Fue invitado especial a la boda real en Holanda de la princesa Máxima y el futuro rey Guillermo Alejandro, y entre 2001 y 2004 fue miembro del jurado de los premios Grammy.

Premios Cubadisco y reconocimientos internacionales como el Ascap en Estados Unidos avalan su carrera, mientras que el disco Locos por mi Habana fue el álbum cubano más vendido en el mundo en 2004.

Manolito Simonet es capaz de crear en cualquier género, por eso el resultado final, lo que llega a nuestros oídos, es algo tan sabroso. Nos hace felices cuando bailamos y es que él, como La Habana, tiene un swing y es por eso que nos llama.