Latinoamérica con Obama o Romney
especiales
En el tercer y último debate electoral sobre política exterior celebrado en la Universidad de Lynn, en Florida, sólo el republicano Romney mencionó brevemente el área, y no para bien.
En su opinión, Obama tiene predisposición al diálogo con algunos líderes de la región, lo que considera una "debilidad".
En esos debates preelectorales, la balanza en materia de política exterior -tema de menor interés para el elector estadounidense preocupado más por la economía- se inclinó hacia Medio Oriente, donde la nación imperial ve su continuidad en el control de recursos diseñado sobre una base bélica.
Se trata de un aparente olvido de Latinoamérica por los presidenciables estadounidenses, pero que ya data de poco más de una década, contexto en el cual las naciones del centro y sur del hemisferio occidental estrechan alianzas tanto a nivel de países como regional.
Así, nacieron algunos organismos integracionistas como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA).
Estados Unidos no es ajeno a este resurgir del subcontinente americano cuyos pueblos cada vez son menos dependientes de él y tienen más autonomía política y económica, al abrir nuevos mecanismos de intercambio basados en la solidaridad y complementación.
El subcontinente apuesta ahora por las relaciones sur-sur, donde el comercio y los lazos diplomáticos con otras regiones como Asia, en particular con China, se incrementan, pese a que aún existe mucha subordinación a Estados Unidos en lo económico.
De acuerdo con un análisis de la publicación Inter-American Dialogue acerca de los nexos entre Estados Unidos y Latinoamérica, "las relaciones entre ambas partes son cada vez más distantes".
"La calidad e intensidad de los lazos han menguado. Los Estados Unidos son cada vez menos relevantes en relación con los intereses de la mayoría de los países de la región", añade.
Desde su punto de vista, "la capacidad de Estados Unidos para desarrollar e implementar estrategias -sobre todo de cara a los problemas que más afectan a los latinoamericanos- ha disminuido", precisa el estudio.
Analistas estiman que quien gane los comicios del próximo martes no representará un cambio particular para esta área geográfica. No obstante, persisten las interrogantes acerca del futuro de la región en caso de que triunfe Obama o Romney.
Se sabe que la estrategia militar, so pretexto de la lucha contra el narcotráfico, continuará con la presencia de bases militares y efectivos del Comando Sur, aún con el arrinconamiento de que son objeto por parte de gobiernos como los de Argentina, Venezuela, Ecuador o Bolivia.
Insistirá el vecino del norte en sus tratados de libre comercio, con lo que intentará expoliar las riquezas naturales, a pesar de las medidas implementadas por buena parte de las naciones para preservar sus recursos.
El tema migratorio es otro que también interesa a la región, y las mayores amenazas las ve en el Partido Republicano, que tiene en su plataforma política propuestas conservadoras y radicales contra la inmigración ilegal.
De manera general, en Latinoamérica se espera menos de los republicanos que de los demócratas, en cuanto a asuntos favorecedores.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, durante su visita a Chile en octubre pasado deseó "la mejor de las suertes" al candidato demócrata, Barack Obama.
A juicio de Correa, "siempre para América Latina los gobiernos republicanos han tenido una política exterior mucho más desconocedora, mucho más simplista y primitiva".
De igual forma, el jefe de Estado venezolano, Hugo Chávez, manifestó su deseo de que Obama sea reelegido.
"Ojalá con el próximo Gobierno, y ojalá sea el de Obama!, como ya lo dijera, podamos nosotros rehacer el diálogo con Estados Unidos", enfatizó Chávez.
El gobernante opinó que, de ganar el candidato presidencial republicano, la relación sería "mucho más difícil porque uno hace una evaluación del candidato de la extrema derecha y de sus alianzas y en verdad se acercan a la locura", remarcó.











Añadir nuevo comentario