UNEAC: 59 años

La Uneac de Fidel y Guillén, la de los grandes intelectuales y artistas cubanos del siglo XX, la que fue pilar del acto fundacional de la cultura en Revolución, cumple 59 años. Es una historia intensa, pletórica de acontecimientos, de debates complejos y fructíferos. Ha sido el diálogo franco y constructivo de los creadores con sus instituciones, la oportunidad de aportar a la sociedad. Porque la cultura es sostén y materia de la identidad, de la nación toda. Lo dijo Fidel Castro: lo primero que hay que salvar es la cultura.

Aquel congreso de agosto de 1961 fue muestra de la vocación humanista de una Revolución que entendió y asumió el arte y la literatura no como privilegio de elites, sino como derecho inalienable de todo el pueblo. Una Revolución auténtica tiene que ser, también, una Revolución de la cultura.

En años de aplicación de raigales políticas para el acceso y la promoción del hecho cultural, la Uneac estuvo en la vanguardia. Y también participó en meridianas discusiones sobre la naturaleza misma del arte, su responsabilidad social, su impacto en la calidad de vida de la ciudadanía. No ha sido un camino fácil, pero las grandes obras suelen demandar grandes empeños.

Y al empeño de la Uneac su sumaron desde el principio los mejores, los más reconocidos, los más activos y respetados creadores. Esa ha sido una de sus misiones: aglutinar. Reunir en torno a principios esenciales un conjunto diverso de visiones, de maneras de hacer y expresar la cultura. Escritores, músicos, actores, bailarines, realizadores de cine, radio y televisión, artistas visuales, diseñadores… todos encontraron espacios en la Uneac.

En Congresos y otros importantes encuentros se han discutido temas fundamentales. Fidel estuvo muchas veces, dialogante, atento, con el mismo espíritu del que hizo gala en las reuniones en la Biblioteca Nacional, en junio de 1961, génesis de la organización.

59 años de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba. Pasado, presente, porvenir… Es la Unión de todas las generaciones, los de ayer y los de hoy. Es la Unión que ratifica su compromiso permanente con la construcción de una sociedad cada vez más justa. Parte indiscutible de una gesta. Garantía de continuidad.