Reytor, a lo grande, lleva a equipo (m) cubano de espada a la final en Lima

En el asalto que daba el pase a la discusión del título, Reytor, medallista de plata en la Copa del Mundo de Vancouver, Canadá, en 2017, marcó el toque de oro en tiempo extra contra un viejo conocido de duras batallas, el venezolano Rubén Limardo, campeón olímpico de Londres 2012.

De esa forma, Cuba derrotó 43-42 a Venezuela en el Centro de Convenciones de Lima, en una de las semifinales de esa arma, en una disputa que tuvo de todo, emociones, tensión y mucha entrega por los dos conjuntos.

Por la presea dorada de esa modalidad colectiva, los espadachines cubanos rivalizarán con los argentinos, quienes vencieron 45-39 a los estadounidenses.

Estamos súper felices por este resultado, siempre confiamos en nosotros y nunca dejamos de creer en la posibilidad de llegar tan lejos, declaró a la prensa en la zona mixta Luis Enrique Patterson, quien reemplazó en ese momento a Reytor, sobrecargado de tensiones y carga emocional por el gran triunfo conseguido minutos antes.

Le ganamos a un equipo muy fuerte, los hermanos Limardo son fuertes los tres y con mucha experiencia al más alto nivel, pero salimos a dar pelea y volvimos a derrotarlos, como mismo hicimos en el Campeonato Panamericano de esgrima, el pasado mes de julio.

Nos ayudamos unos a otros, siempre apoyándonos y dándonos ánimo, con mente positivo en cada asalto, estamos súper contentos, pero todavía queda batalla y saldremos con todo en la final en busca del oro, afirmó.

En suelo limeño, los representantes de la nación caribeña vencieron 45-37 al conjunto de Brasil en los cuartos de final.

Hace cuatro años en suelo canadiense los esgrimistas cubanos apenas sumaron un metal de bronce gracias al elenco varonil de espada conformado por Reytor, Reynier Henrique y Ringo Quintero, este último sustituido ahora por Patterson.

Hasta el momento, la mayor de las Antillas suma en ese deporte dos bronces, por intermedio de Reytor y Harold de la Caridad Rodríguez, quien este miércoles subió al podio en la prueba individual del sable para hombres.

Todo eso a la espera de lo que hagan los espadachines, que ya como mínimo aseguraron en el segundo lugar en el podio.