Rusia–América Latina: ¿Un acercamiento inédito?

Tras intensas y aportadoras jornadas de debates, concertación de ideas y emprendimientos comunes, concluyó este fin de semana el VI Foro Internacional Rusia e Iberoamérica que –al decir de sus organizadores y participantes– ha ido más allá de lo académico, proponiendo cómo articular más y mejor los mecanismos comunes y enfrentar juntos los desafíos en la formación de un nuevo orden mundial multipolar.

El encuentro –que deberá celebrarse en lo adelante cada dos años- se erige como un importante puente de pensamiento entre Latinoamérica y el gigante euroasiático. Según declaraciones exclusivas a Prensa Latina del profesor e investigador de la Universidad de Buenos Aires, Argentina, Hernán Camarero, «es un evento extraordinario para pensar problemas económicos, históricos y del devenir de la política latinoamericana y sobre todo en sus vínculos con la nación eslava».

Para el intelectual argentino, se discuten allí temáticas que no son frecuentes en otros congresos, lo que le otorga un valor adicional: «permite una puerta de entrada a la diplomacia rusa y a las relaciones que tuvo, tiene y puede tener este país con América Latina».

Por su parte, la directora del Comité Nacional Ruso para la Cooperación Económica con los Países Latinoamericanos, Tatiana Mashkova, consideró que más allá de lo puramente teórico, tiene también una gran relevancia y es de gran ayuda para los empresarios, pues «permite entender todo lo que se desarrolla detrás de las cifras». 

«El criterio de los científicos, académicos y políticos nos da luz en las pautas empresariales y de inversión», agregó la economista rusa.

La posibilidad de romper ciertos cercos informativos en relación con Rusia, formarse sus propios criterios y no tener solo los que de forma sesgada imponen los intereses de Estados Unidos y sus aliados europeos, es también uno de los méritos de este tipo de encuentro, agregaron varios de los participantes a agencias de prensa.

Así lo valora el historiador argentino, Hernán Camarero: «Llegar hasta San Petersburgo y conocer de primera mano la realidad rusa y escuchar a los expertos con datos, con evidencias es muy importante, y nos permite regresar a nuestros países y elevar el nivel de debate para salir de la manipulación y mentiras que establecen los medios informativos tradicionales y hegemónicos, los cuales tienen mucha influencia en la región».

Lo que los une 

Para el vicecanciller ruso Serguéi Riabkov existe hoy un acercamiento "inédito" entre Rusia y América Latina, pues ambas comparten el rechazo a la política occidental de «dictados, presiones y sanciones», coinciden en que «la formación de un nuevo mundo multipolar es un proceso irreversible" y la hegemonía unilateral de EE.UU. y sus aliados tiene sus días contados.

En entrevista con Sputnik, el diplomático ruso –que también tuvo a su cargo la apertura del VI Foro Internacional Rusia e Iberoamérica– considera inútiles los esfuerzos de Occidente por provocar una ruptura en las relaciones entre el país eslavo y la región latinoamericana y caribeña, pues el intercambio comercial «sigue creciendo» a pesar de las «dificultades impuestas».

Por solo poner un ejemplo, Riabkov resalta el aumento en el volumen de exportaciones e importaciones con socios latinoamericanos y caribeños a pesar de las sanciones impuestas a la nación euroasiática, que encarecen el flete de barcos, los seguros de cargas y complican las transacciones en dólares estadounidenses.

«Pero no se trata de una situación nueva para Rusia», recuerda, mientras reconoce, además, que hace varios años su país está enfrentado intentos de complicar el «normal funcionamiento» del comercio exterior.

Especialistas consideran, por otra parte, que deben reforzarse aún más las relaciones ruso-latinoamericanas tras la llegada de Moscú a la presidencia pro tempore de los BRICS, en enero próximo.

En ese sentido, se ha anunciado que en la próxima cumbre de los BRICS, que deberá celebrarse en la ciudad rusa de Kazán en octubre de 2024, se propondrá la creación de una nueva categoría de Estados socios dentro del grupo, lo que abrirá las puertas a más países de América Latina y el Caribe.

De concretarse la propuesta, será algo que aportará al grupo más «recursos, posibilidades y potencial», y así lo considera Riabkov, quien considera relevante la reciente ampliación de los BRICS con seis nuevos miembros.

Lo que se avizora parece ser un  camino que, sin dudas, reforzaría los lazos ya existentes entre Rusia y las naciones latinoamericanas y caribeñas, más allá de lo histórico, lo comercial, lo económico y político, estableciendo un abrazo cultural a niveles sin precedentes, en el que la cooperación y el intercambio en beneficio mutuo puedan más que las barreras del idioma y la distancia geográfica. Ojalá así sea.