Activistas en EE.UU. piden a Obama cumplir promesa de cerrar Guantánamo
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Activistas y organizaciones sociales elevaron un exhorto a la Casa Blanca y al presidente Barack Obama para que vete el proyecto de asignaciones de fondos al Departamento de Defensa, aprobado por el Senado, que impide el cierre del centro de detención de Guantánamo, situado en la base naval de Estados Unidos en la bahía homónima cubana.
A finales de noviembre, el Senado norteamericano aprobó una enmienda a la ley de presupuesto del Pentágono para 2013, que prohíbe la transferencia de prisioneros de la cárcel de Guantánamo hacia otras prisiones en suelo estadounidense.
La Cámara alta aprobó la enmienda -con 54 votos a favor y 41 en contra- e inmediatamente la Casa Blanca amenazó con vetar el proyecto legislativo completo, por ser el cierre de Guantánamo una de las promesas incumplidas del Mandatario reelecto, durante su primer período de Gobierno.
La organización Human Rights First (Derechos Humanos de Primera) publicó una carta en el diario The Hill -en Washington D.C.- una carta firmada por una treintena de militares retirados, destinada a lograr que el Ejecutivo vete el proyecto aprobado en el Senado.
El texto refiere un reciente informe de la Oficina de Control Gubernamental (GAO, por sus siglas en inglés), anexa al Congreso de Estados Unidos, que admite la posibilidad de cerrar el centro de detención, por costarle al Estado más de 114 millones de dólares anuales.
Según el documento, los 166 detenidos en Guantánamo pueden ser transferidos a 98 instalaciones que tiene el Buró Federal de Prisiones y otras seis del Departamento de Defensa, todas en suelo estadounidense.
Igualmente, los activistas sacan a relucir las numerosas denuncias sobre el empleo de técnicas crueles en esa instalación carcelaria, tales como la privación del sueño, encierro de los prisioneros desnudos en habitaciones a bajas temperaturas y extenuantes interrogatorios.
Asimismo, la carta recuerda al presidente Obama la promesa incumplida de cerrar la prisión, manifestada durante su campaña electoral a los comicios de 2008. También le recuerdan que prometió prohibir el uso de torturas en los interrogatorios y abrir la revisión de los expedientes de algunos presos, una promesa tampoco concretada.
Desde 2002, durante la primera gestión del expresidente George W. Bush, Washington mantiene un centro de internamiento en esa instalación militar, ubicada en territorio cubano contra la voluntad del pueblo y el Gobierno de la isla caribeña.
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