En su intervención en una reunión del Senado sobre la situación en Cachemira, el máximo diplomático paquistaní cargó contra Nueva Delhi por seguir violando la libertad religiosa y los derechos humanos de los cachemires desde el pasado 5 de agosto cuando La India revocó el artículo 370 de la Constitución, que otorga a la región un estatus especial.
“La India ha intensificado la agresión a lo largo de la Línea de Control (que divide a Cachemira entre La India y Paquistán) y arrestado a 6 000 personas y las ha sido sometidas a torturas”, alertó Mahmud.
El funcionario paquistaní criticó asimismo al Ejecutivo indio por continuar restringiendo “la libertad religiosa de la población en Cachemira y privarle de servicios médicos y medicamentos”.
Las medidas de seguridad y el bloqueo de noticias, entre otras restricciones, siguen siendo vigentes en la Cachemira administrada por La India desde el 5 de agosto.
El Gobierno del primer ministro indio, Narendra Modi, dice que los cambios son para liberar al territorio del separatismo y sus opositores lo critican por su ideología nacionalista.
Tanto el Gobierno de Paquistán, como organizaciones pro derechos humanos como Human Rights Watch (HRW) han llamado a La India a cesar el “tratamiento agresivo” en Cachemira.