Maduro insta a EEUU a levantar sanciones y a dejar persecución económica contra Venezuela

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, instó el jueves al Gobierno de EEUU a levantar las sanciones y a dejar la persecución financiera, al tiempo que pidió libertad económica para su país, durante su discurso anual en el que rinde cuentas a la nación sobre su gestión en el 2022.

'Entonces la capacidad que tenemos para hacer llegar el mensaje y para unirnos y decirles al Gobierno de Estados Unidos, no queremos más sanciones, levanten las sanciones criminales sobre el pueblo de Venezuela, ya basta de sanciones criminales, ya basta de persecución económica, ya basta de persecución financiera, libertad, libertad, libertad económica, libertad comercial, libertad financiera, libertad para Venezuela, ya basta', detalló el mandatario en una transmisión en Cadena Nacional​​​.

Como cada año, el mandatario llegó a la sede del Palacio Federal Legislativo acompañado de una comisión de diputados, para presentar su mensaje anual a la nación ante la Asamblea Nacional (parlamento unicameral), los Poderes Públicos y los ciudadanos de este país.

De acuerdo con los datos revelados por el presidente, las sanciones contra Venezuela han estado dirigidas en un 42 por ciento a organismos del Gobierno; un 18,7 por ciento a la industria petrolera; un 17 por ciento al sector de economía y finanzas y un siete por ciento el sector privado.

A la par, Maduro denunció que la actividad petrolera en su totalidad está bajo persecución 'con el objetivo de que Venezuela no tenga los recursos que libremente debe percibir para invertirlos en su economía y en los derechos sociales de los ciudadanos'.

El mandatario detalló que su nación experimentó una caída abrupta en las ventas de crudo, a raíz de las sanciones, lo cual representó una caída del 99 por ciento de los ingresos, y recalcó que hasta las fecha se han implementado más de 900 sanciones contra el país.

Desde 2017, comenzaron las sanciones directas de EEUU contra la empresa estatal Petróleos de Venezuela S.A. (Pdvsa), y estas impidieron a Caracas cualquier transacción en el sistema financiero, desde financiamiento, hasta compra de repuestos o contratación de mantenimiento.

En ese entonces, la producción llegó a los niveles más bajos de hasta 100.000 barriles diarios.