Los cien años de Pier Paolo Pasolini

Los cien años de Pier Paolo Pasolini
Fecha de publicación: 
5 Marzo 2022
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Cuando falleció en 1975, Pier Paolo Pasolini era ya reconocido como uno de los grandes del cine italiano. Se puede decir más: del cine universal. No solo era un cineasta con una larga lista de filmes, obras que en su momento conmocionaron el panorama fílmico europeo: era un artista total, un intelectual múltiple: poeta, novelista, periodista, dramaturgo, filósofo, pintor y también una figura política que llegó a resultar francamente incómoda al establishment, incluso, a los que defendían sus propias ideas.

Un artista incómodo, así pudiera definirse. Pero —y eso no lo pudieron negar hasta sus más decididos adversarios— un gran artista. Su estilo era inconfundible. Y siempre defendió ese estilo ante las olas homogeneizantes de la cultura de masas. Algunos creen que el suyo fue un segundo neorrealismo italiano, muy cercano al espíritu de la célebre Commedia dell'arte. Sus personajes solían ser gente del pueblo, muchas veces pobres de solemnidad... o delincuentes, marginales. Tenía mucho que ver con el ambiente que primaba en la Italia de la posguerra. Pasolini no miró al otro lado, ni se regodeó en mundos ideales. El humor de sus historias podía llegar a ser muy grueso. Había mucha ironía. Y un marcado patetismo.

Pero más que esa zambullida en la cara menos amable de la cotidianidad, que de cualquier forma la asumieron también otros grandes directores italianos, lo que sacudió al panorama artístico del momento fue la temática sexual de muchos de sus trabajos: demasiados desnudos, demasiado erotismo, demasiados escarceos o franca actividad sexual en sus películas... desde el punto de vista de algunos puristas o autoridades eclesiásticas.

Tampoco es que fuera muy ortodoxa su visión de la religión, pues la lectura marxista de ciertos textos bíblicos fue una de sus obsesiones. Aunque reconocidos críticos católicos han defendido que su recreación de la vida de Jesús en El Evangelio según San Mateo es una de las más hermosas jamás filmadas.

Su espectro temático fue amplísimo: desde versiones de clásicos de la literatura y la cultura universal, como Edipo Rey, El Decamerón, o Las mil y una noches; pasando por historias de un descarnado realismo; hasta cine de arte y terror, como la tan discutida y atacada Salò o los 120 días de Sodoma, que le valiera a Pasolini prohibiciones e incluso serias amenazas.

Su propia muerte por asesinato, en circunstancias no aclaradas, pudieran estar relacionadas con ese ambiente opresivo en el que vivió sus últimos años, aunque algunos sostengan la tesis de que los móviles del crimen fueron solo sexuales.

Cien años cumple este sábado el inmenso Pier Paolo Pasolini. Cumple, porque su legado permanece. La Cinemateca de Cuba presenta hasta el domingo 13 de marzo, en colaboración con la Embajada de Italia en Cuba, un abarcador ciclo en los capitalinos cines Chaplin y 23 y 12, que incluye todos sus largometrajes, varios documentales realizados por Pasolini o sobre él y los guiones escritos por el cineasta para otros directores.

Es una oportunidad de lujo para acercarse a la creación de uno de los más singulares artistas de su tiempo. Y de más allá de su tiempo.

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