FAO alerta sobre sostenido incremento de precios de alimentos

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) dio a conocer este jueves que los precios mundiales de los alimentos aumentaron en enero pasado por octavo mes consecutivo y llegaron a su nivel más elevado desde julio de 2014.

En un reporte publicado en su sitio web, la agencia de las Naciones Unidas detalló que el índice de precios de los alimentos elaborado a partir de los productos más comercializados a nivel internacional registró un promedio de 113.3 puntos.

Ello equivale a un 4,3 por ciento de crecimiento respecto a diciembre de 2020, agrega.

El comunicado refiere que el incremento se sustentó, sobre todo, en el comportamiento de los cereales, aceites vegetales y el azúcar, a partir de situaciones ocurridas con la producción y la demanda.

En el caso de los cereales, sus precios crecieron 7,1 por ciento, debido a alzas de 11,2 por ciento en el maíz y 6,8 en el trigo. Aquí se combinaron existencias de maíz menores a las previstas en Estados Unidos y suspensión de exportaciones de Argentina, en momentos en que China realizó abultadas compras.

El trigo, por su parte, registra una alta demanda a nivel mundial frente a proyecciones de que decrecerá la exportación de Rusia en este renglón.

El índice de precios de los aceites vegetales creció 5,8 por ciento (nivel más alto desde mayo de 2012). De acuerdo con la FAO, ello se debió a una menor disponibilidad de aceite de soja en Argentina y de palma en Indonesia y Malasia, estos últimos afectados por las precipitaciones y por escasez de mano de obra.

En lo concerniente al azúcar, la FAO calculó un incremento de 8,1 por ciento como consecuencia de una mayor demanda frente a proyecciones de menores cosechas en Rusia, Tailandia y la Unión Europea, entre otras razones.

Por otra parte, creció también 1,6 por ciento el índice de precios de la FAO en cuanto a los productos lácteos y uno por ciento respecto a la carne.

El informe de la FAO también pronostica mayores volúmenes del comercio mundial y a una brusca disminución de las reservas mundiales de cereales.