China rechaza resolución de Parlamento Europeo sobre Hong Kong

El ministro de Asuntos Exteriores de China, Wang Yi, rechazó este jueves una resolución del Parlamento Europeo adoptada la víspera que exige la imposición de medidas restrictivas unilaterales contra personas y entidades de su país relacionadas con la región especial administrativa de Hong Kong.

En un comunicado dado a conocer este viernes, la Cancillería de China informó que Yi sostuvo una conversación telefónica en la noche de este jueves con su homólogo de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, en la que invitó a la UE a trabajar por superar las diferencias en torno a Hong Kong.

Durante el diálogo, el funcionario chino le manifestó que su país "se opone a todo tipo de sermoneo hipócrita al respecto. La determinación de China para salvaguardar su soberanía es inquebrantable", acotó.

La resolución del Parlamento Europeo (PE) cita supuestas violaciones de derechos humanos en Hong Kong y contra la minoría musulmana uigur en la provincia de Xinjiang (oeste).

Yi calificó este pronunciamiento como una expresión de injerencia en los asuntos internos de China, nación que tomará las medidas necesarias para responder en caso de que fuera necesario, dijo.

También aseguró que "las dos partes deben buscar terreno común a la hora de resolver sus diferencias. Hay que llegar a un entendimiento mutuo y eliminar obstáculos para promover relaciones saludables", agregó.

Según el comunicado de la Cancillería, Borrell expresó a Yi que "la UE respeta la soberanía e integridad territorial" de China y "no apoya la independencia de Hong Kong".

Le dijo que "Bruselas no tiene la intención de participar en confrontaciones institucionales", así como que "no está de acuerdo con la imposición de sanciones unilaterales a otros países".

El representante diplomático europeo alegó que "la UE actúa en base a los estatutos de la Carta de la Organización de las Naciones Unidas y a la Declaración de los Derechos Humanos".

La UE sancionó el 22 de marzo pasado a cuatro funcionarios y a una entidad china por supuestas violaciones de los derechos humanos en Xinjiang. En ese momento, China respondió sancionando a diez europeos, la mitad de ellos eurodiputados, y cuatro entidades, a la vez que convocó al embajador de la UE en China, Nicolas Chapuis, para presentar una queja formal ante Bruselas.