Evo Morales inaugura Casa grande del pueblo en Bolivia

Durante las palabras de apertura, el mandatario señaló que con la construcción de este edificio se buscó acabar con la condición de Estado inquilino, término que hace alusión a la falta de infraestructuras para las instituciones públicas.

De acuerdo con Morales, el Estado gastaba anualmente alrededor de 20 millones de dólares en alquiler de inmuebles para sus ministerios, dinero que se ahorrará con la nueva instalación a la que se mudan las carteras de la Presidencia, Comunicación, Medio Ambiente y Agua, Culturas y Turismo, y Energía.

El mandatario explicó que la Casa Grande del Pueblo también responde a la necesidad de centralizar al Ejecutivo para atender mejor las necesidades de la población boliviana.

Otro de los objetivos de esta nueva sede, es dejar atrás el pasado colonial y neoliberal de Bolivia, en parte representado por al antiguo palacio de Gobierno, conocido como Palacio Quemado, el cual se convertirá en museo.

Asimismo, la administración actual apuntaba a tener un edificio más representativo de la cultura nacional.

Nos dimos cuenta que en el viejo palacio no había un solo símbolo andino amazónico, todo era europeo. Decidimos construir un espacio que representa la nueva Bolivia plurinacional, apuntó.

Como parte del acto de inauguración, organizaciones sociales realizaron una marcha que se inició en la plaza San Francisco de La Paz.

Igualmente, se desarrollaron rituales ancestrales y una fiesta cultural autóctona en la que también participaron el vicepresidente, Álvaro García Linera, y el gabinete ministerial del país.

La Casa Grande del Pueblo recoge elementos arquitectónicos tiwanakotas y sus espacios llevan nombres de líderes indígenas y regiones ancestrales del país.

La nueva infraestructura comenzó a construirse en diciembre de 2014, cuenta con 26 pisos, un auditorio y un helipuerto.