Los 'indignados' se manifiestan contra Bankia en Madrid
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Golpeando cacerolas y a gritos de "ladrones", miles de personas se manifestaron el sábado en Madrid, delante de la sede de Bankia, para protestar por el rescate público de este banco, que precipitó un voluminoso plan de ayuda europeo del sector bancario español.
Convocados por varios grupos del movimiento de los 'indignados', los manifestantes marcharon previamente durante dos horas.
Por el camino pegaron carteles en cada sucursal de Bankia, en los que podía leerse: "Este banco engaña, estafa y echa a la gente de su casa", en referencia a los desahucios de los propietarios que no pueden pagar su hipoteca inmobiliaria y a los "productos tóxicos" vendidos por la entidad.
Ante la sede del banco, protegido por policías antidisturbios, los manifestantes gritaron: "¡Ladrones!, ¡Culpables!", constató una periodista de la AFP.
"Vuestra deuda no la pagamos"; "Queremos una solución, los banqueros en prisión", gritaron también los manifestantes, haciendo ruido con tambores, pitos y cacerolas.
"Hemos empezado con las cacerolas cuando la prima de riesgo ha superado los 500 puntos", cuenta Alejandra Pinel, una estudiante de derecho de 25 años, refiriéndose a la disparada de las tasas de interés de la deuda española, que han hecho que para el Gobierno sea muy costoso captar capital en los mercados financieros.
Los manifestantes denunciaban el rescate público de 23.500 millones de euros de Bankia y el plan de rescate europeo de hasta 100.000 millones de euros destinado a la banca española, cuyos detalles están por definir. "Rescate bancario = robo ciudadano", podía leerse en un cartel.
"Esa deuda privada de los bancos la quieren convertir en deuda pública", denunció Óscar, un desempleado de 46 años.
El jueves pasado, los 'indignados' presentaron una denuncia contra la antigua dirección de Bankia por por "falsedad contable" y "estafa mercantil".
Según el abogado Juan Moreno Yagüe, de acuerdo con los artículos 282bis, 290 y 295 del código penal, podrían ser condenados a penas de "uno a seis años de cárcel", añadió.
El nuevo presidente del banco, José Ignacio Goirigolzarri, reconoció "errores" en la creación del banco, nacido de la fusión de siete cajas de ahorros y su entrada en bolsa en julio de 2011. Desde entonces, el banco ha revisado sus cuentas y reconocido unas pérdidas de 2.979 millones de euros, tras haber publicado primero unos beneficios de 309 millones de euros. La acción ha perdido desde entonces más de dos tercios de su valor.
Se trata de la cuarta denuncia contra Bankia, tras las presentadas por el sindicato Manos Limpias, considerado de extrema derecha, el partido UPyD y una facción del movimiento Democracia Real Ya.
La fiscalía anticorrupción también ha abierto una investigación preliminar para comprobar si se hubiera podido cometer algún tipo de delito en la creación de Bankia y su introducción en bolsa.
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