Marabana: Fiesta de andarines de dimensión universal

Es el mayor argumento para expresar su presencia en la tradicional carrera que desanda las calles de la Capital. En el caso del azteca Cisneros, un trotamundos de 61 años, estar en La Habana por primera vez tuvo una significación especial. “Tenía la necesidad de conocer Cuba, para mí tenemos mucho en común con ustedes. Son muy especiales en su carácter y lo he vivido así. En lo personal he participado en maratones en Hungría, Estados Unidos, España, pero en ninguno he experimentado este nivel de satisfacción”, confesó expectante al cruzar la meta luego de más de 3:45 horas de esfuerzo.

La historia de Whitney es diferente. A sus 27 años, natural de Fort Laurderele, al norte de La Florida, decidió conocer Cuba con sus padres. No vino a través del Grupo Insight Cuba, tampoco lo hizo con buena parte de la comitiva estadounidense asociada a la maratón de Boston. Llegó por Varadero, se inscribió online y disputó la primera maratón de su vida en el circuito citadino. “Le agradezco enormemente a la vida esta oportunidad. Cuba es un país que despierta mucha curiosidad, estuve entrenando en Chicago diariamente corriendo alrededor de 10 millas, pero nunca me había enfrentado a una maratón. Para ser mi primera experiencia me siento muy feliz” manifestó al fusionarse con sus padres, llena de sudor, en un abrazo.

Por cierto Estados Unidos fue el país foráneo más representado en la cita, con 850 andarines, escoltado por Alemania (145), Francia (96), México (95) y España (80).

En total la participación extranjera quebró todo precedente, pues el total superó los 1 800 atletas, cifra que en materia organizativa solo ha sido superada por los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1982 y los Panamericanos de La Habana 1991.

De hecho, de cara al año próximo seguramente se incrementarán estos dígitos, pues Marabana se incluirá, según palabras del puertorriqueño Víctor López, presidente de la Confederación de atletismo de Norte, Centroamérica y el Caribe (NACAC por sus siglas en inglés), como una de las paradas oficiales del circuito de media maratón de la región, incluso con premio en metálico.

EN PRIMER PLANO

Metidos de a lleno en el plano competitivo Marabana tuvo por sexta ocasión consecutiva en el capitalino Richer Pérez, a uno de sus ganadores. Nuevamente Richer recorrió la mitad del segmento más rápido que nadie, en 1:06.19 horas, si bien ligeramente separado de sus 1:04.52 cimeros, fiel a la estrategia trazada. Le secundaron en el podio otros dos habituales: Yuleidys La O (1:08.10), y Luis Ángel Martínez (1:10.23).

“Representa mucho para mí ganar siempre en mi país. Responder a mi formación, a pesar de los trabajos que he pasado. Ya poseo marca para el Campeonato Mundial de atletismo del próximo año. Pretendo igualmente incursionar en el centroamericano del deporte, y quiero que se me tenga presente para todo compromiso venidero. En lo personal quiero enviarle un saludo especial a mi esposa en México que está embarazada”, sentenció.

Richer se dio cuenta además que el reloj oficial de Marabana se detuvo, señal de lo imbuido que estaba en el segmento. Específicamente se paró en el minuto 46 con 49 segundos.

“Al principio parecía que podía tirarle a mi mejor marca. Luego me acomodé en el circuito y sin máxima oposición terminé de correr cómodo. Pretendo el año próximo, cuando se eleve el nivel del Marabana, frisar los 1:02, que es un tiempo de relieve internacional, para ello, desde este minuto, me preparo. He escuchado que el estadounidense Bernard Lagat, uno de los mejores del mundo en 5 000 y 10 000 metros en su tiempo, está interesado en participar el próximo año en Marabana, insertarse en el circuito NACAC.

En Río participar fue un mérito y experiencia única. A pesar de terminar en el puesto 46 lo disfruté, pero quería correr 2:16 y eso me hubiese colocado entre los 20 primeros”.

Jorge Luis Suárez, el policía, también ofreció sus impresiones: “el clima nos favoreció a todos los corredores, la temperatura agradable. La preparación estaba diseñada para los 42 kilómetros, pero la comisión me invitó a incursionar en la maratón de Panamá por primera vez. Seguí la estrategia parcial y corrí 1: 14 y fracción”, señaló el citadino de 45 años, que participó en su edición 16 del Marabana y que simultanea sus entrenamientos con la responsabilidad de ser Jefe de Sector de la barriada de El Fanguito, además de que considera mantener un régimen riguroso de alimentación y descanso. De cara a la carrera itsmeña, Suárez aseguró que pretende oscilar entre los 2:23-2:30 horas.

Entre las féminas, las tres agraciadas de la media maratón resultaron ser Yudileyvis Castillo Tumbarell (1:17.58), Milena Pérez (1:21.04) y la norteña Ashley Carroll (1:26.35).

Mientras, en el trazado rey, coparon las tres primeras posiciones en el masculino Henry Jaen (2:34.29), Yumier Fouman (2:36.30), y Arien Reyes (2:39.24).

Entre féminas reinaron Misleidys Vargas (3:06.09), la holandesa Inez-Anne Haagen (3:11.22) y Lisandra Gómez Charon (3:18.22).

Una fiesta de andarines, con clima bondadoso y complicidad de una constelación de estrellas que premiaron a los ganadores, como Javier Sotomayor, Enrique Figuerola, Zoila Barros, Regla Torres, Félix Savón, Roberto Hernández, Orlandito Martínez, entre otros…

Un 30 cumpleaños especial para Carlos Gatorno y su tropa, que continuaron con el apoyo en materia de soporte técnico del Maratón Popular de Madrid, con drone sobrevolando las inmediaciones del Capitolio incluido, y la mirada fiel de apoyo de José Ramón Fernández, titular del Comité olímpico cubano, y del doctor Antonio Becali, presidente del Inder.