El Estado ruso cada año organiza actividades masivas en las que los trabajadores demuestran su agradecimiento por las políticas reivindicativas y el incremento de las pensiones y el salario mínimo.

La policía de Moscú estima que la marcha en la Plaza Roja cuenta con al menos 140 mil personas, es el acto festivo más multitudinario de todos los que se celebran hoy en toda Rusia.

A pocos metros del corazón de la capital, otros miles participaron en un mitin del Partido Comunista de Rusia.

«Cada vez más gente acude a la fiesta del 1 de Mayo en toda Rusia», dijo a los periodistas Vladímir Kashin, uno de los líderes más destacados de los comunistas.

Kashin destacó: «Un aspecto importante de nuestra manifestación es todo lo relacionado con las fronteras de nuestro país y su soberanía. El pueblo de Rusia está unido en su apoyo a la lucha antifascista».

De acuerdo con el político, los comunistas apoyan la política exterior del presidente Putin y del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia.

Al contrario de lo que podría creerse, el Partido Comunista ha aplaudido la coincidencia de la fecha del Día de los Trabajadores con la Pascua Ortodoxa, y ha criticado las regiones en las que las manifestaciones de los trabajadores podrían ser canceladas para dar paso a las procesiones religiosas.