Grupo Bilderberg: Nada ajeno le es ajeno

Sesenta años de creado lleva el Grupo Bilderberg, al que nuestro Comandante en Jefe había descrito en agosto del 2010 en el colega Granma como un ente siniestro de lobistas que manipulan al público para instalar un gobierno mundial que no reconoce fronteras y no rinde cuentas a nadie de sus decisiones.

Al efecto, Fidel citó el libro Los Secretos del Club Bilderberg, escrito en el 2006 por Daniel Estulin, quien, posteriormente subrayaba ideas y daba a conocer otras en las que exponía con fundamento que en la reunión cumbre anual del  l6 de junio del 2013, en Watford, en las afueras de Londres, el grupo concluyó que necesita hacerse con el control de toda la alimentación y destrozar la economía, con el fin de poder reducir la población mundial.

Tal determinación dominó la más reciente reunión de este grupo oculto de poder, en el 2014, a la que asistieron alrededor de 150 personas, incluidos políticos, miembros de la realeza, banqueros, multimillonarios y empresarios, en el hotel Marriot, en Copenhague, Dinamarca.

Para ellos, el progreso y el desarrollo de la sociedad es directamente proporcional a la densidad de población. Si hay progreso en el desarrollo tecnológico, habrá más riqueza, más personas y menos comida para todos. Es decir, para que esos elegantes depedradores de pueblos y poseedores de grandes fortunas puedan comer, gran parte de la población tendría que desaparecer.

Como se ve, no están tratando de resolver el problema de la alimentación, sino exterminar  a muchas personas para “solucionarlo”.

Este grupo tiene su antecedente malsano en la salida a escena de la Reserva Federal de Estados Unidos en 1913, aunque aunó sus elementos de integración en 1954, en el Hotel de Bilderberg, en Oosterbeek, Holanda, en la que el exiliado político polaco Józef Retinger, preocupado por el creciente antinorteamericanismo en Europa Occidental, propuso una conferencia internacional de líderes de países europeos y Estados Unidos, con el fin de promover el “atlanticismo” , en la cooperación política, económica y militar. Ello se logró con la asistencia de 15 delegados de once países europeos y once norteamericanos, estos sugeridos por la Agencia Central de Inteligencia (CIA).

No siempre ha habido buenas relaciones entre  el Club y ciertos hijos del Imperio, como cuando en 1973 se creó la Comisión Trilateral estadounidense, que siempre ha mostrado su tendencia a resolver sus problemas mediante las armas.

Y es que ha cambiado el concepto acerca del gobierno mundial, porque los integrantes del grupo, siempre favorables a la eliminación de los seres que no les sean “útiles”,  han coincidido en proclamar que las guerras del futuro se librarán no con armas, sino con la tecnología, de tal manera que un teléfono, un 'smartphone' cualquiera tiene más tecnología que las naves espaciales que llegaron a la Luna en los años sesenta.

Al respecto, explica Estulin que “ si tú puedes hacerte con el control de la tecnología del futuro, puedes controlar el mundo entero en todas sus manifestaciones, porque todo lo que nos rodea es una tecnología en un estado puro y por eso tienes Google, Amazon, las empresas como Microsoft y Apple, que están en todas estas reuniones. Y, obviamente, empresas como Google son un aparato imprescindible de la seguridad nacional de EE.UU., cuyo objetivo no tiene nada que ver con ofrecer servicios, sino con el control total y absoluto".

De todas maneras, y menos sofisticadamente, acciones más violentas han sido ordenadas por el grupo que encabezan familias superricas y sus descendientes, quienes son intocables por la justicia y exonerados de impuestos de por vida. Cada vez que hacen un “salvataje económico” están comprando los bancos y financieras del mundo, apropiándose poco a poco del país al que “salvan”.

Ejemplos hay muchos, aunque entre los más sonados está el asesinato del presidente John F. Kennedy en 1963
El asunto era no dejar testigos para que no se conociera que, aparte de la implicación en menor escala: mafia, “gusanera” cubana y  autoridades de Dallas, existió algo más importante y que el propio Kennedy denunció semanas atrás en su discurso ante la Asociación de Prensa, en el Waldorf Astoria, de Nueva York: la existencia de sociedades secretas en la sombra que estaban ejerciendo entidades que respondían principalmente a los Rockefeller, entre ellas el Club Bilderberg.

Al efecto, emitió la  Orden Ejecutiva 11 110, en la que retiraba la potestad de fabricar dólares sin aval de oro, y de otorgar créditos (deuda publica) a la Reserva Federal, propiedad de banqueros privados, que afectaba también a los Rockefeller y a los también superpoderosos Rothschild, que cobraban créditos de la nada, o por blanqueo de la droga -de la cual tenían el monopolio, así como el del mercado del oro en Londres.  Esto  fue la más importante y decisiva gota que colmó el vaso de la conspiración que le costó la vida.

La mira actual de Bilderberg está centrada principalmente en perjudicar a Irán y Rusia, y tramar complots de diversas índoles que obstaculicen a China, así como mantener el control que tiene desde el 2008 sobre el presidente norteamericano. Barack Obama. Pero esto, así como otras explicaciones sobre sus integrantes y quehacer, requerirá de nuevos análisis.