Capriles: ¡Soy chavista!

especiales

Capriles: ¡Soy chavista!
Fecha de publicación: 
6 Abril 2013
0
Imagen principal: 

A nueve días de las elecciones en Venezuela su ultraderecha semeja a una persona que se está ahogando y lanza golpes ciegos sobre el agua o se aferra al cuello de quien trata de salvarlo.

Sus expresiones y hechos así parecen corroborarlo, pues en su delirio llegan a hurgar en los orígenes de su fuerte contrincante chavista, Nicolás Maduro Moro, en busca del más mínimo detalle que les ayude.

En esa tarea, como era de esperar, los acompañan medios de difusión masiva que tienen sus mismas ideas y escala de valores humanos y políticos.

Una publicación que tomó partido junto al candidato opositor, Henrique Capriles Radonski, El Nuevo Herald, escribió este viernes sobre “las raíces colombianas de Nicolás Maduro.

Según documentos que el Herald dice haber obtenido, la madre del candidato presidencial chavista, Teresa de Jesús Moros, nació en Colombia.

Prosigue diciendo que los orígenes de Maduro “son un misterio”, entre otros motivos porque existe poca información respecto a su infancia, y ello ha generado “toda una suerte de mitos sobre sus orígenes.

Como parte del nuevo capítulo señala que pasó una gran parte de su niñez en la localidad colombiana llamada Cúcuta, y remite su fuente a un diario connotadamente enemigo de los chavistas, El Tiempo.

Otro periódico ultraderechista, Diario Las Américas, amplió la versión del Herald al manifestar que, de acuerdo a personas no identificadas de aquella localidad, Maduro trabajó allí como ayudante de bus.

Acto seguido pone en duda afirmaciones de su carnal Herald, y de ellos mismos, al manifestar: “La señora de 83 años de edad no cuenta con ingresos en este sistema, lo que hace suponer que su residencia no es Colombia”.

Llama la atención que como fuente de lo dicho se mencione a RCN Noticias, una televisora colombiana fusionada a la estadounidense Miami-Fox en español, sumamente conservadora.

Aún más significativo, que para destilar incertidumbre sobre el origen del candidato chavista, primero en todos los sondeos, se tomen de las manos cuatro fuentes periodísticas de extrema derecha.

Observadores subrayaron que la maquinación se fragua cuando hace solo unos días el ex presidente colombiano Alvaro Uribe, un conocido paramilitar, atacó groseramente a la Revolución bolivariana.

En Madrid, el periódico El País exigió abiertamente que la OEA sea uno de los observadores en los comicios del 14 de abril en Venezuela, pero el Consejo Nacional Electoral de ese país ha puntualizado que solo aceptará el cumplimiento de esa misión por parte de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR).

Capriles había solicitado públicamente a los militares venezolanos que “protejan el resultado de los comicios”, y al mismo tiempo movilizó a un grupo de artistas e intelectuales que hicieron negativas declaraciones, algo que Maduro, con su estilo dinámico, contestó invitando a figuras positivas.

Este viernes, a un mes de la muerte de Chávez, en la OEA tuvo lugar otro acontecimiento de especial significado, pues la comparecencia del jefe del régimen golpista de Paraguay, Francisco Franco, a menos de dos semanas de sus elecciones, quedó ridiculizada por una asistencia extremadamente baja.

Franco había declarado antes que “la ausencia de Chávez puede no ser un milagro, pero sí es una bendición”, dicho así en la antesala de una visita suya a Estados Unidos.  

Maduro continuó arrastrando multitudes al compás de un interesante estilo de trabajo político, iniciado por Chávez, donde, en sentido general, priman la creatividad y un aporte a la manera de hacer política revolucionaria.

Nuevas encuestas de opinión pública refuerzan la ventaja de Maduro, al tiempo que este volvió a  fustigar las imitaciones de  Capriles, a quien sintetizó diciendo: lo único que falta es que diga “soy chavista”.

Añadir nuevo comentario

CAPTCHA
Esta pregunta es para comprobar si usted es un visitante humano y prevenir envíos de spam automatizado.
CAPTCHA de imagen
Introduzca los caracteres mostrados en la imagen.