Gran escándalo marca el comienzo de elecciones primarias en EE.UU.

En EE.UU., los precandidatos presidenciales del Partido Demócrata apuraron el lunes su campaña en el estado de Iowa (centro-oeste), el primer estado en votar en las primarias de la referida formación.

Según informes locales, los ciudadanos de Iowa se fueron a dormir la noche del lunes sin conocer una cifra que indicara cómo quedaron las asambleas electorales con las que empezó el proceso de selección del contrincante que tendrá que medirse con el actual presidente de EE.UU., Donald Trump.

Debido a unos inconvenientes que surgieron con la aplicación utilizada para el conteo, los resultados nunca se conocieron. Al respecto, pese a que el Partido Demócrata ha desmentido que se haya producido un hackeo, los hechos reseñados han pasado a considerarse un “daño” y un “escándalo” para los demócratas.

“Encontramos inconsistencias en el informe de tres conjuntos de resultados”, ha indicado Mandy McClure, directora de Comunicaciones del Partido Demócrata.

McClure ha explicado, asimismo, que, además de los sistemas tecnológicos que se utilizan para tabular los resultados, también se utilizan fotografías de los mismos, así como un rastro de papel, con el objetivo de que las cifras finales coincidan y asegurarse así de la exactitud de los números informados.

“Esto es simplemente un problema de informes, la aplicación no se cayó y esto no es un hackeo ni una intrusión. Los datos subyacentes y el rastro de papel son sólidos, y simplemente tomará tiempo informar los resultados”, ha declarado.

Ante tal coyuntura, el senador demócrata por el estado de Vermont (noreste), Bernie Sanders, ha decidido dar sus propias cifras. De acuerdo con los resultados dados a conocer por el mismísimo Sanders, su persona ha quedado en primer lugar con el 40 % de los precintos; el alcalde de South Bend, Indiana, Pete Buttigieg, está en segundo lugar; la senadora demócrata Elizabeth Warren, en el tercer puesto; y el exvicepresidente de EE.UU. Joe Biden, en cuarto lugar.   

De cara a las presidenciales del 3 de noviembre, el lunes, cerca de 600 000 habitantes del estado de Iowa afiliados al Partido Demócrata estaban invitados a acudir a unas 1700 salas para expresar públicamente por cuál candidato habían decido optar.

Iowa es un estado crucial en las primarias, pues el conseguir buenos resultados en esta circunscripción se traduce en impulsar a un candidato a conseguir nuevas victorias en los estados que votarán justo después.