Para ello usan las redes sociales y anuncios publicitarios ya que han decidido expresar públicamente su denuncia sobre el comportamiento electoral de Trump.

Por eso, fundaron el “Movimiento Cubano con Biden” y el “Movimiento Venezolano con Biden”.

Valentina Semidey, venezolana dijo a EFE:

“Es algo muy duro porque cuando uno empieza a hablar del tema en la casa aparecen los reclamos y la gritadera, por eso me indigna la forma en la que el presidente se aprovecha de sembrar división y complica más las cosas”.

Con 18 años, reside en la ciudad de Boca Ratón, a 73 kilómetros al norte de Miami y este año votará por primera vez.

Ella estudia Ciencias Políticas en la Florida State University para “poder entender qué hace que gente inteligente se ponga tan ciega. Están convencidos que Trump es el único que ha ayudado a Venezuela y que Biden es comunista”.

Sofía Hidalgo, de 18 años, estadounidense de familia cubana residente en Miami, también votará por primera vez y participa activamente en “Cubanos con Biden”.

Vive con su abuelo en una calle llena de propaganda a favor de Trump”.

Pintó a favor de Biden varios mensajes que dicen: “100% anti-comunista”, “100 anti-racista”, “100 anti-facista”, “100 con Biden” y los coloca entre las pancartas de sus vecinos.

Hidalgo divide su tiempo entre clases de matemáticas y actividades políticas, así como reconoce que le “duele mucho la quebradura que hay por el tema electoral”.

Añade que “hay miembros de mi familia con los que no puedo hablar porque nos acusan de querer que el comunismo se reinstale en Estados Unidos”.

Al mismo tiempo, la jueza cubano-estadounidense Ana María Polo, anfitriona del popular programa de televisión “Caso cerrado”, sacó un video en Facebook condenando a los latinos que “atacan y acusan de comunista a cualquiera que apoya a Biden, en especial los jóvenes”.

Además, los artistas venezolanos Erika de La Vega, comediante e hija de cubanos, y Michel Haussmann, director de la compañía Miami New Drama, condenaron los acosos a jóvenes, expresaron su apoyo a Biden y al movimiento a su favor.

De esta forma se demuestra que ni montañas de tergiversaciones han podido falsear del todo la verdadera realidad que se vive en Estados Unidos.