Dona nasobucos al pueblo Confecciones Freixas: una importante firma en el mundo de la moda

«El amor en tiempo de coronavirus», es como muchos no han tardado en titular gestos de solidaridad en el contexto de la nueva cepa que atemoriza al mundo.

Y ese valor resalta mucho más hoy, cuando es la Covid-19 la que vino a recordarle a la humanidad que somos vulnerables; que salvándonos, podemos salvar a los demás, y que como aquel final de La peste, de Albert Camus: «Esto es lo que se aprende en medio de las plagas, hay más cosas en los hombres a admirar que despreciar».

Bajo ese axioma, se agradecen las iniciativas que por estos días se viralizan en redes sociales, como artistas cubanos ofreciendo conciertos desde la vivienda, vía online; amas de casa con destreza en la costura que sintonizan su talento con la urgencia epidemiológica en el país y elaboran nasobucos para distribuirlos gratuitamente.

Circula en Facebook, por ejemplo, una fotografía de la estrella del deporte Ana Fidelia Quirot haciendo esas piezas de protección personal.

Confecciones Freixas, una importante firma en el mundo de la moda, dentro y fuera de Cuba, también hace su aporte a la sociedad. En exclusiva para Radio Habana Cuba, comentó su director, Mario Freixas.

El artista también habló de la efectividad de la materia prima con que se elaboraron los nasobucos.

Confecciones Freixas llevó adelante la iniciativa justo antes de recesar la producción hasta que se normalice la situación sanitaria del país y vuelva la empresa a retomar sus diseños de vestuarios, que constituyen una expresión de cubanía. No obstante, quedan inconformes por no haber hecho más.

Mario Freixas resaltó el papel de los medios de comunicación ante el escenario epidemiológico del país, y aprovechó para enviar un mensaje a sus colegas, con el fin de que se multipliquen esos gestos de solidaridad y amor.

Sirva este momento de aislamiento social para reflexionar en casa. Sin dudas, cuando pase este tiempo, le daremos más sentido incluso al maravilloso espectáculo que es la salida del sol y que pocos se detienen a admirar.

Dedique más tiempo a la familia, inspírese en ese poema que tanto piensa escribir. Termine o empiece a leer un libro. Anímese a elaborar esa receta de cocina que leyó.

Realice videos caseros y súbalos a Facebook o a Twitter. Valore más la vida, deténgase en las pequeñas cosas que nos hacen grandes seres humanos, y no olvide que la mayor muestra de solidaridad está en quedarse en casa, donde, salvándose, SALVA.