El Gobierno nepalí da "máxima prioridad" a la reconstrucción de los monumentos
especiales
El Gobierno nepalí anunció hoy que da "máxima prioridad" a la reconstrucción de los monumentos y lugares históricos destruidos por el terremoto que golpeó Nepal, que también convirtió en escombros otras 200.000 edificaciones.
"Damos máxima prioridad a la restauración de los monumentos y lugares con importancia histórica, cultural o arqueológica" que resultaron destruidos o dañados por el terremoto, anunció en un comunicado el Ministerio de Exteriores nepalí.
Para ello, la Jefatura de Exteriores hizo una petición a la comunidad internacional para que "comparta su experiencia" en labores de restauración y "coopere en la preservación" de su "antigua herencia cultural".
El Gobierno nepalí pidió además la donación de 2.000 millones de dólares para "los esfuerzos de rehabilitación y reconstrucción", en un país en el que resultaron destruidas por el terremoto al menos 200.552 edificaciones y otras 186.285 resultaron dañadas.
Nepal, uno de los países más pobres del mundo, obtiene parte de sus ingresos gracias a las expediciones de alta montaña, dada su cercanía a la cordillera del Himalaya, y al turismo cultural gracias a la riqueza monumental del Valle de Katmandú.
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), algunos centros históricos que resultaron gravemente dañados por el terremoto son las plazas Durbar de Katmandú y Patan, los palacios de Hanuman Dhoka en la capital, el recinto monumental de Bhaktapur y la célebre torre Dharahara.
El Ministerio de Exteriores también tuvo unas palabras de "sentidas condolencias" hacia las familias de los extranjeros que murieron en el terremoto y que, según los últimos datos oficiales, ascienden a 58, de un total de 7.365 muertos en todo el país.
Según el listado oficial de extranjeros fallecidos, la mayoría proceden de la India y el resto de China, Francia, Japón, Estados Unidos, Australia, Italia o Estonia, e incluye a la española Raquel Gómez, de 47 años, fallecida en la zona de Langtang, aunque las autoridades españolas mantienen que su muerte no se debió al seísmo.
El terremoto de 7,8 grados del 25 de abril ha sido el de mayor magnitud en Nepal en 80 años y el peor en la región en una década desde que en 2005 otro seísmo ocasionara más de 84.000 muertos en Cachemira.
Añadir nuevo comentario