Arte en La Rampa: cultura cubana a la mano de todos

La artesanía cubana en todo su esplendor, las nuevas tendencias del diseño de muebles e interiores, lo utilitario en casa con las obras de pintores contemporáneos y de la vanguardia, una amplia gama de productos confluyen en la Feria Arte en La Rampa, la mayor del verano en Cuba.

Justo a la arrancada de esa estación, los cubanos se disponen a disfrutar de una feria, que más allá de la actividad comercial ofrece un encuentro con la cultura.

Arte en La Rampa se antoja sitio ideal para llevar a casa una pieza de la orfebrería, una reproducción de un artista plástica, algo de las nuevas tendencias del vestir, pero también un novedoso disco, un libro.

Y es que el popular Pabellón Cuba, de la avenida 23 de la barriada del Vedado, es ya un templo del arte en todas sus manifestaciones, adonde llegan miles de personas durante los meses de julio y agosto.

Unos 80 estands están a disposición del público con propuestas disímiles: bisutería, textiles, cerámica y calzado, esta última con gran variedad para niños. Tenemos mucha demanda, explicó a Prensa Latina uno de los miembros del equipo de Correa, un artesano que se consolida en la feria por sus atractivas propuestas para este público.

Sus modelos combinan el cuero con las fibras naturales, los colores del Caribe. Son muy aceptadas, gustan mucho, sobre todo para esta época, destaca.

Otro en la misma cuerda de aprovechar las bondades de la naturaleza es Rafael, un veterano de las artes manuales que convierte las fibras del coco en flores, hojas, espirales. Toda una gama de colores para la ambientación, a tono con las nuevas tendencias ecológicas.

La fibra de coco es flexible. La puedes inclinar, poner firme. Pero también puedes jugar con los colores. Esta decoración para interiores está muy de moda, la gente la busca mucho, relató.

Arte en casa, una de las propuestas más consolidadas, llega a su décima edición. En ella se mezcla el arte utilitario y la plástica. Una vajilla, un juego de tasas, una cortina, un mantel, un cepillero, porta especies, sombrillas, cualquier objeto del hogar lleva la reproducción de un artista de la plástica cubano.

Imágenes de Roberto Fabelo, Flora Fong y Servando Cabrera entre otros decoran estos artículos. Muchos desean incluso, tener una colección completa inspirada en un artista específico, explicó Marianela Dufflar, del comité organizador.

Es una oportunidad única para que cada cual se lleve a casa una pieza de lo mejor del arte contemporáneo, dijo Sandra Álvarez, una de las asiduas clientas. Este año compraré la cortina, el próximo completaré los demás para decorar mi baño, destacó.

Pero también buscan obras de artistas de la plástica. Este año están a la venta las tradicionales colecciones de reproducciones y otras nuevas se integran a las propuestas.

Las carpetas La Colección incluyen obras del pintor Servando Cabrera, dedicada al 90 aniversario de su natalicio, y otra centra su mirada en el paisajismo cubano, con pinturas de Víctor Manuel, Leopoldo Romañach, Tomás Sánchez, Mario García Portela y Vicente Rodríguez Bonachea, entre otros.

Al unísono a la actividad comercial, la feria propone conciertos de jazz, trova, de repentistas e improvisadores. Una vez concluidos estos, el público puede adquirir discos de estos músicos.

Conciertos de Arnaldo y su Talismán, que abrió la feria, del trovador Tony Ávila, Maikel Blanco, el cantautor Descemer Bueno y la agrupación Habana D primera figuran entre los buscados.

También de otras agrupaciones, como el recopilatorio de éxitos del dúo Buena Fe, que incluye más de 60 canciones y 25 videos clips, además de su más reciente fonograma Dial.

La colección Ellas y ellos cantan boleros, así como el CD Mis anhelos, de la cantante cubana Omara Portuondo, son algunos de los más vendidos.

Para completar las propuestas, el público puede disfrutar de las pasarelas, los desfiles de moda en lo que cada creador pone en manos del público sus sugerencias, cargadas de imaginación y talento.

La fiesta de la artesanía vuelve a tocarnos las puertas y cada verano se torna un encuentro con todo lo necesario para rodearnos en la cotidianidad de obras de la cultura cubana.