Aunque este jueves apenas celebrará su 22 cumpleaños, la tenimesista cubana Daniela Fonseca puede presumir de haber participado en par de torneos olímpicos.

Esa niña matancera que encontró en el deporte una “válvula de escape” para su hiperactividad, debutó en la edición de Tokio 2020 el mismo día que cumplió los 19 años. Esta vez festejará la señalada fecha entrenando, pero con la misma ilusión que le ha guiado nuevamente hasta la justa más importante del planeta.

«Ese día se realizará el sorteo y espero que eso me dé suerte», dice a JIT con desenfado, como queriendo restar presión mientras descuenta las horas que le separan del estreno en la sala de París Sur Arena, junto al habanero Jorge Moisés Campos.

«Ojalá tengamos un buen camino en los dobles mixto, porque ganar dos partidos nos pudiera poner en medallas», dice como quien sueña despierta, pero con los pies bien puestos sobre el terreno que pisa, pues sabe que la aspiración es compartida con las 16 parejas mejor ranqueadas en el mundo.

«Cada partido será muy difícil. Lo sabemos y nos hemos preparado bien. Nos toca en estos días perfeccionar los detalles y sobre todo reforzar la seguridad que tenemos como pareja», reconoció consciente de que se trata de una visión común de ambos jugadores.

Campeones panamericanos de la modalidad en Santiago 2023, Daniela y Jorge Moisés se compenetran a las mil maravillas. La explosividad de ella contrasta con la aparente flema con que él define cada tanto, ya sea con un exacto contraataque, o defendiendo una pelota “complicada”.

La dupla mixta de la Isla ha evolucionado desde el debut olímpico en la capital nipona, y aunque es muy probable que le tocará enfrentar en su partido inicial a una de las cuatro mejores parejas del escalafón vigente… mantiene la aspiración intacta.

«Estamos muy bien, concentrados en la meta y solo queda esperar», añadió la yumurina con una sonrisa cómplice, porque sabe que el reto es enorme, pero no imposible de superar.

Cuba también estará representada en la lid de tenis de mesa por el experimentado Andy Pereira, ganador de una plaza para el evento individual masculino. Para él será la tercera experiencia bajo los cinco aros, a la que llega con el afán de mejorar su legado: hasta ahora es el único cubano que ha conseguido un triunfo en estas lides.

Ese privilegio lo disfruta desde la ronda preliminar convocada en la edición de Londres 2012, cuando no pudo superar el cruce inicial en el cuadro principal.

La París Sur Arena forma parte de la llamada Expo de París, un recinto con ocho pabellones distribuidos en 228 000 metros cuadrados y que acoge cada año varios eventos, entre ferias y convenciones.

Además del torneo de tenis de mesa, en sus instalaciones se celebrarán los de balonmano, levantamiento de pesas y voleibol.