El Gran Stadium de La Habana, rebautizado como Coloso del Cerro, y más tarde como Estadio Latinoamericano, es objeto de un millonario remozamiento que le aproximará a su inicial esplendor.

Conocida como «El Latino», la mayor instalación beisbolera de Cuba es sometida a una compleja reparación por parte de la Empresa de Servicios de Ingeniería número tres, de La Habana, que incluye a los clubes houses de primera y tercera bases, así como también la cubierta techada.

Idio Alemán Gregorio, director técnico de la empresa contratista, informó a la AIN que el monto de la inversión asciende al millón de pesos, más 500 mil en moneda convertible, principalmente para la sustitución de todas las añejas tejas.

Orlando Martén Ojeda, especialista al frente de las obras, expuso que las acciones se iniciaron el pasado 2012 con demoliciones y excavaciones para la cimentación de paredes y muros, y se extenderán a lo largo del presente año.

Cada club house tendrá total independencia y contará con sus baños, puesto médico, área de taquillas, cuarto de árbitros, aulas, local para el masajista y oficina para el director.

Hoy, los locales del equipo visitador (primera base), así como el baño para el público, todos enchapados con mármol, exhiben pisos nuevos, modernas luminarias y herrajes hidrosanitarios, labores que, asimismo, se acometen en sus similares de la banda de tercera.

Para ambos especialistas, las mayores complejidades se enfrentarán cuando se inicie la sustitución del gigantesco techado y el tratamiento y pintura de la estructura metálica.

Inaugurado el 26 de octubre de 1946 y sede de múltiples eventos nacionales e internacionales, el Coloso del Cerro se erige en «cuartel general» del equipo azul, Industriales, y orgullo de los habaneros.