El actor estadounidense Robert Redford, de 75 años y con 52 de carrera, dejó un mensaje de confianza en la juventud al desembarcar por primera vez en el Lido de Venecia para presentar en la 69a. edición de la Mostra el estreno mundial de "The Company You Keep", su noveno largometraje como director.

Redford estuvo acompañado por su coprotagonista en el film, el también estadounidense Shia LaBeouf, pero dejó en casa a la esperada Julie Christie, que encarna a otro de los personajes de la película.

"Las protestas de los años 70 tuvieron gran valor, incluso a nivel político, aunque hoy pareciera que algunas manifestaciones multitudinarias como Occupy Wall Street no han hecho mella en el mundo de las finanzas, que sigue dominando la riqueza mundial", dijo Redford.

"Como dice el personaje de Julie Christie en mi película: 'Los súper súper ricos siguen prosperando, mientras el mundo entero cae en la miseria'", agregó.

"Pero, a pesar de todo, tengo plena confianza en la juventud, siempre y cuando nosotros seamos capaces de dejarle como herencia un país libre de corrupción", subrayó.

"La década del 70 es un período en el que me identifico, me pertenece, pero el periodismo de aquellos años no existe más: las nuevas tecnologías, Internet, Facebook, Twitter, con su flujo constante de información, en lugar de facilitar la verdad la obstaculizan, y es difícil extraerla de toda esa masa de noticias, algunas verdaderas y otras falsas", aseguró.

"Más allá de la historia -indicó Redford- mi película se concentra sobre todo en lo que un hombre está dispuesto a hacer para defender a su familia".

"Cuando en 2003 salió a la venta la novela de Neil Gordon en la que está basada mi película me enamoré inmediatamente de la trama y del personaje central, sabía que iba a ser difícil montarla pero también sabía que valía la pena y que sería un buen film", agregó.

Redford recalcó que en los años en que transcurre la acción de "The Company You Keep" él mismo "estaba ocupado en formar una familia".

La única actividad política en la que se reconoce, explicó, es la defensa del medio ambiente. "Pero muchos amigos míos eran activistas y yo comprendía sus razones aunque nunca me comprometí políticamente", subrayó.

"Otro tema del film son las consecuencias que tienen las decisiones tomadas en la juventud en el resto de nuestras vidas" continuó Redford.

Por su parte para Shia LaBeouf, su personaje -un periodista que descubre la identidad de un activista de los movimientos radicales de los años 70 forzándolo a salir de la clandestinidad- "no es un personaje negativo como se cree al principio. Creo que es un idealista que busca sobre todo la verdad".

"A pesar de sus ínfulas de creerse el mejor cronista del mundo -afirmó- en realidad es un hombre solo, carente de amor, que compensa su soledad con el amor por la profesión de periodista".

"Esta es la primera vez que me ofrecen un rol de antagonista y me divertí mucho. Si a esto le agregamos tener de frente a un mito del cine como Robert Redford, la diversión se convierte además en un desafío", concluyó.