Chile: La rebelión estudiantil no piensa parar

"Queremos convocar a este paro nacional en claro rechazo al lucro de la educación", dijo en un comunicado el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile y uno de los representantes de la Confech, Gabriel Boric.

Se aprobó la acción en la reciente reunión de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) en la ciudad de Antofagasta. Asimismo, los participantes anunciaron que tienen la adhesión de las organizaciones de estudiantes secundarios.

Los activistas chilenos que luchan por los derechos universitarios decidieron organizar la convocatoria tras un escándalo en la Universidad del Mar. El rector de este centro educativo privado, Raúl Urrutia, anunció que los dueños no remuneran a profesores y funcionarios, privilegiando pagar el arrendamiento de los locales que ocupa la universidad.

En este sentido los estudiantes, que durante el último año no han cesado las protestas contra la educación de pago, han denunciado que el lucro es uno de los principales vicios del sistema educativo del país.

Las sociedades que controlan estas universidades constituyen de forma paralela empresas inmobiliarias que arriendan locales a la misma universidad y por esa vía obtienen beneficios, como es el caso descubierto en la Universidad del Mar, que tiene presencia en once regiones del país.

Chile es el país con la educación superior más cara del mundo, según la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico, y el único en América Latina donde todas las universidades son de pago, lo que muchos estudiantes perciben como injusto.

Durante el año pasado los alumnos chilenos convocaron cerca de 40 marchas callejeras, exigiendo a su Gobierno una educación pública gratuita y de calidad. En algunos casos las marchas desembocaron en disturbios y varias detenciones. Desde principios de este año los estudiantes no han parado de oponerse al sistema convocando acciones de protesta, principalmente en la capital de Chile. A mediados de mayo decenas de miles de estudiantes volvieron a tomar las calles de Santiago protestando contra la injusticia en la educación superior del país.