El artista... ¿efímero o perdurable?

especiales

El artista... ¿efímero o perdurable?
Fecha de publicación: 
2 Mayo 2012
0

Corría el año 1927 y en Hollywood, George Valentin era un admirado astro del cine mudo, que al devenir sonoro lo sumerge en el olvido. Entretanto la joven extra Peppy Miller empieza a ser propulsada al firmamento de las estrellas.

  
Así de simple comienza el argumento de la película El artista, que dirigida por el francés Michel Hazanavicius, se alzó, entre otros lauros, con el premio Oscar al mejor filme de 2012, estatuilla que en actuación mereció Jean Dujardin.
  
La cinta se caracteriza por las interpretaciones tanto de Dujardin como de Bérenice Bejo, que dotados de humanismo y vigor escénico, imprimen singular fuerza a sus personajes. Encanto, emoción y química desborda la pareja, que nada tiene que envidiar a sus colegas de reparto, los conocidos John Goodman, James Cromwell y Penelope Ann Miller.
  
Con este filme, rodado en blanco y negro, Hazanavicius devolvió al mundo algo perdido: la magia del cine silente. Sin ser la mejor cinta muda de la historia del séptimo arte, El artista logra adentrarse en el mundo interior del espectador transmitiéndole alegría y el recuerdo de una época pasada.
  
Aunque sin el colorido de fastuosas producciones El artista, que se mueve en las cuerda del drama y la comedia, resulta un filme singular, al cual, además de las actuaciones y conducción, respalda un cuidadoso diseño de vestuario y la maravillosa banda sonora compuesta por Ludovic Bource, apartados también acreedores al Premio de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood.
  
El rodaje de un proyecto mudo en blanco y negro es hoy en día un riesgo, frente a un mercado de digitalización de salas, tecnologías 3D y más que esplendorosos efectos visuales.
  
El artista rompe con este esquema y muestra la vigencia del cine del ayer, sensibilizando al espectador con una historia bien contada y un elenco a todas luces maravilloso.
  
Más allá de aquella etapa, la película reverencia al cine de todas las épocas, que recuerda a Charles Chaplin en clásicos inolvidables como Tiempos modernos y El chicuelo, o un poco más acá el inolvidable musical Cantando bajo la lluvia.
  
La propuesta fílmica, integrante de la valiosa selección del XV Festival del Cine Francés en Cuba, combina drama, musical, comedia y romance. El artista resulta simpática cinta, visualmente cautivante y pletórica de encanto e ingenio.
  
A través de la banda sonora, la película subraya momentos claves, como la llegada de los musicales y en primer plano, hace patente el eterno amor hacia el mundo del celuloide.
  
Este digno homenaje al cine mudo, concebido con suma elegancia, sencillez y emotividad, hace que El artista llegue a todo tipo de público. En última instancia, su carácter efímero o eterna perdurabilidad lo decidirá el factor tiempo.    

Añadir nuevo comentario

CAPTCHA
Esta pregunta es para comprobar si usted es un visitante humano y prevenir envíos de spam automatizado.
CAPTCHA de imagen
Introduzca los caracteres mostrados en la imagen.