«Pude entrenar y pelear con el clasificado olímpico de mi división, Mahama Cho, y de cierta forma probarme ya que como es conocido hace más de un año no incursionamos en eventos competitivos», declaró a JIT hoy el doble campeón mundial Rafael Alba, único clasificado del taekwondo cubano a los Juegos Olímpicos de Tokio.

«El campamento en Manchester, Inglaterra, fue muy provechoso, pues tuvimos la posibilidad de entrenar prácticamente a diario con petos eléctricos. Su ausencia nos lleva afecta desde hace poco más de 4 años», abundó quien junto a sus compañeros se encuentra en aislamiento en La Habana, como establece el protocolo sanitario para los que entran al país.

«A ello le sumamos que entrenamos por casi 20 días con una de las selecciones más prestigiosas en estos momentos, la de Inglaterra, que cuenta con medallistas olímpicos o mundiales», destacó el espigado atleta de la división de más de 80 kilogramos.

«Para el resto de los muchachos resultó oportunidad ideal de probarse frente a competidores de talla olímpica y mundial sin la presión con la que normalmente salimos a cada competencia», concluyó el rey planetario de Puebla 2013, en México, y Manchester 2019.

Participaron en la preparación conjunta por los británicos, además de Cho, quien es de origen marfileño plateado en el Campeonato Mundial de Taekwondo de 2017 en la categoría de +87 kg y quinto en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016 en +80 kg; Jade Louise Jones, dorada Londres 2012 y Río de Janeiro 2016 en –57 kg, y Laurence Williams, oro en el Campeonato Europeo de Taekwondo en 2016 y 2018 en –67 kg.

También estuvieron Bianca Salden, tercera en +67 kg en Río de Janeiro 2016 y Bradely Sindey, bronce en el mundial de 2017 y oro en 2019.

Por los cubanos, quienes acompañan a Alba en el aislamiento sanitario, asistieron su sparring Yadier Limonta (80kg), medallista en eventos internacionales; Kelvin Calderón y Midriel Santoya, de los 68 kg; Arlettys de la Caridad Acosta y Yamitsi Carbonell, de 67 y +67, respectivamente; así como Tamara Robles (57) y Zalarit Milagros Cortés (62).

Los criollos estuvieron supervisados por René García, entrenador jefe del colectivo técnico masculino.