Viengsay Valdés: En Cuba los niños se alistan al ballet como en España al fútbol

En una entrevista ofrecida a ese medio de comunicación español, la reconocida bailarina cubana conversó sobre los retos de sus nuevas responsabilidades dentro del BNC y la futura proyección de la aclamada agrupación danzaria, fundada en 1948 por Alicia y Fernando Alonso.

Ella sigue siendo la directora general y yo me ocupo de la subdirección artística, explicó Valdés refiriéndose a la prima ballerina assoluta, y agregó que su actual cargo es una gran responsabilidad, pero que la llevará “con todo el honor y el orgullo de pertenecer al Ballet Nacional de Cuba”.

Siento un gran respeto por ese gran legado histórico de sus fundadores. Hay que preservarlo, pero también debemos actualizarnos a nivel internacional. Nuestra escuela cubana de ballet ha generado bailarines que han sido estrellas mundiales; algunos se han ido a otras compañías, pero han sido formados en Cuba, agregó.

Tenemos más de 700 obras en nuestro repertorio, incluyendo los grandes clásicos, explicó la reconocida bailarina, quien definió a la actualización de la compañía con las últimas tendencias, como uno de sus propósitos.

Ante la interrogante de a cuánto había renunciado por estar en lo más alto, la artista respondió que a nada, pues según sus propias palabras “he tenido la suerte de ser querida en mi propio país, crecer en mi propio país, triunfar y volver a mi tierra. Pocos artistas en el mundo pueden triunfar fuera y ser reconocidos en su país”.

Viengsay se refirió, además, a que una de las grandes preocupaciones del gobierno cubano siempre ha sido la cultura, la cual está muy desarrollada porque cuenta con el apoyo incondicional del Estado.

Son gratuitas todas las artes plásticas: la música, el ballet, la danza... así nacen y nacen artistas como flores. La cultura es muy accesible al pueblo. Cualquiera que pase delante del teatro, hasta el más humilde, puede ver al Ballet Nacional de Cuba, reconocido en todo el mundo. Eso permite tener un país muy avanzado culturalmente, explicó al referirse al bajo costo de las entradas para ver el ballet.

Valdés atribuyó la importancia que se concede en Cuba al ballet al trabajo de masificación de la agrupación desarrollado por sus fundadores, quienes según alegó “se dedicaron a viajar por toda la Isla. Actuaron en teatros, pero también en una granja, en un pequeño teatrico, en un estadio... En Cuba todos conocen el ballet y los niños se alistan a él, como hacen los niños de España con el fútbol. Es algo de lo que los padres están orgullosos; no existe ese machismo y se alistan miles de niños al año.”

La artista señaló que, según un estudio de Fernando Alonso sobre la fisonomía del cubano y tomando como modelo a Alicia, se cambió la forma de hacer los pasos en nuestro ballet.

Le dimos la musicalidad, que es algo muy innato de los cubanos; llevamos el ritmo en la sangre. Se caracteriza también por la sensualidad de la mujer, la virilidad del hombre y esa química de la pareja. Los altos saltos de los chicos, por su potencia muscular, y los giros de los bailarines, argumentó acerca de los elementos que caracterizan al ballet cubano.

Ante la pregunta de por qué se quedó en Cuba pudiendo estar en otras compañías seguramente mejor pagada, la subdirectora artística del BNC respondió:

Es por la satisfacción de volver a mi país, donde tengo a mi familia, mi esposo, mi compañía... Me siento bien recibida y bien querida; eso es impagable. Puedo crecer profesionalmente a nivel internacional y regresar a mi querida Cuba.

La actual gira que desarrolla la emblemática compañía por España con la presentación del clásico La Cenicienta, les llevará a ciudades como Granada y Sevilla, en las cuales actuarán el 14 y 16 de junio, respectivamente; y a Madrid, donde estarán a finales del mes, entre los días 26 y 30.