DE CUBA, SU GENTE: Esquina de 23 y estoy viviendo un infierno

DE CUBA, SU GENTE: Esquina de 23 y estoy viviendo un infierno
Fecha de publicación: 
17 Enero 2019
0
Imagen principal: 

—¿Qué quieres decir? —la interrogo.

—Diana, ¡estoy embarazada! Adiós a acostarme sobre las azoteas a las cuatro y media de la madrugada para escuchar los sonidos de la noche. ¿Qué hago ahora?

—Bueno… Siempre está la opción de sacártelo. Al menos, eso es legal aquí, así que no tienes que meterte un perchero esterilizado, una práctica horrible que ha dado lugar a más de una película que he visto en el Festival de Cine Latinoamericano.

—Pero, Diana, tengo 35 años. Sacarse un hijo a los 23 pasa. Pero a los 35 es una pregunta mucho más fuerte.

—¿Estás segura de que quieres hacer esto?

—Ni idea.

—Si fuera tú, estaría más o menos en la misma posición. Lo que te puedo decir es que cuestionarse tener hijos a esa edad es mal visto por la sociedad en que vivimos, así que si estás dispuesta a decirlo demasiado en voz alta, prepárate para las miradas agresivas y cuestionadoras. Las mismas miradas hacia todo lo diferente.

—Eso está muy bonito, pero qué hago.

—Una vez escuché que tener un hijo era como hacerse un tatuaje en la cara. Era algo bastante definitivo.

—¿Cómo que bastante? ¿Cómo algo puede ser «bastante» definitivo? O es definitivo o no lo es.

—Por ejemplo, si tuvieras un hijo babeándote encima ahora mismo, no te preguntaría la connotación de «bastante» dentro de una oración.

—Entiendo el punto. Ay —suspira—, no sé qué hacer.

—Ok. Aquí va mi consejo. No lo consultes con tu cabeza. Consúltalo con tu alma. Pregúntale a tu alma qué es lo que ella quiere. La única razón para tener hijos que se me ocurre es que es un acto de amor. Como todo acto de amor, es algo potente, absoluto y que no necesariamente lleva lógica implícita.

—Lógica no lleva, no. No quiero perder mi vida como es.

—Vamos a vernos en esa esquina y tomarnos una cerveza. Al menos yo me tomaré una. Cuando veas la barba de tu vecino arder, pon la tuya en remojo, dicen.


 altDiana Castaños (La Habana, 1986). Licenciada en Periodismo. Graduada del Centro de Promoción Literaria Onelio Jorge Cardoso. Escritora de guiones infantiles para radio. Premio de Periodismo 26 de Julio en 2008. Ha obtenido el Premio Calendario 2016 por No hay tiempo para festejos, el Premio Memoria 2016 por Lo blanco más allá de la luz y el Premio Pinos Nuevos 2016 por Josefina. Es miembro de la AHS.

Añadir nuevo comentario

CAPTCHA
Esta pregunta es para comprobar si usted es un visitante humano y prevenir envíos de spam automatizado.
CAPTCHA de imagen
Introduzca los caracteres mostrados en la imagen.